La USC busca cómo pagar el asistente para un alumno con gran discapacidad

Tamara Montero
tamara montero SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

Daniel Fiaño, con su padre, en una foto tomada en A Coruña a principios de este mes
Daniel Fiaño, con su padre, en una foto tomada en A Coruña a principios de este mes CESAR QUIAN

La familia estima un coste de 10.000 euros para que Daniel Fiaño haga el máster

14 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Solo queda hacer una propuesta de calendario y, lo más importante, conseguir la financiación necesaria. Porque la Universidade de Santiago, finalmente, tiene la intención de hacerse cargo del coste del asistente personal que necesita Daniel Fiaño para poder cursar el máster que quiere hacer en la Facultade de Ciencias da Comunicación de Santiago. «Malo será», dice su padre, Valentín Fiaño, al otro lado del teléfono. Optimista, sí, pero a la expectativa. Contento porque al final, el plan es que Daniel Fiaño, que tiene una discapacidad física del 94 %, pueda desplazarse todos los días desde A Coruña a Compostela para cursar el máster que le interesa. Y hacerlo acompañado de un asistente, que también estará con él las horas que pase en la facultad.

Es, en principio, la solución a la que han llegado tras una reunión con el responsable del área de integración universitaria de la USC, Javier Agrafojo, que confirmaba que la universidad está estudiando la viabilidad de ese plan. Daniel Fiaño tendría que costearse solo el transporte, tanto del viaje en tren entre A Coruña y Santiago como del desplazamiento entre la estación de tren y la facultad. Del asistente personal se haría cargo la institución.

La solución llega después de que el joven se quejase ante la universidad y el Cermi -el comité español de personas con discapacidad- porque la USC le planteó que usase parte de ayuda que recibe de la Ley de Dependencia para costear unas horas del asistente personal que necesitaba para cursar el máster. La USC explicaba que pide corresponsabilidad porque no recibe ningún tipo de financiación pública para fomentar la integración de los alumnos con discapacidad al tratarse de enseñanzas no obligatorias.

Diez mil euros de coste

Tras las quejas presentadas, Daniel y su padre fueron convocados a una reunión con los responsables de la USC, que tras estudiar el caso le han dado una solución personalizada. «Non é que a USC non queira, é que non pode». La problemática a la que se enfrenta la institución compostelana la comprende Valentín Fiaño. Perfectamente. Por eso es optimista, pero está a la expectativa. Porque ahora es necesario obtener la financiación necesaria para hacer frente al coste del asistente personal desde A Coruña, que es de unos 10.000 euros para el total del curso, según los cálculos que han hecho. «O problema é o de sempre. Os cartos», lamenta Valentín Fiaño. La USC suele recurrir a la ayuda de fundaciones de carácter privado para costear la integración de los estudiantes con discapacidad en la vida universitaria.

«A Xunta obriga a facer as cousas, pero non lles dá o financiamento, ese é o problema», lamenta Valentín Fiaño. «Non é que a USC non queira, é que non pode, porque está obrigada pola lei pero non lle dan os recursos necesarios. O recursos que lle dan é un búscate la vida».

«Facemos apoios segundo as necesidades, non hai un estándar»

No existe un estándar. Es imposible que exista, porque cada persona es diferente. Por eso la Universidade de Santiago estudia cada caso para dar una solución personalizada a cada uno de los alumnos con discapacidad que llegan a sus campus. «Facemos apoios segundo as necesidades de cada persoa, non hai un estándar», explica el responsable del servicio de integración de la USC, Javier Agrafojo. Quizá lo que hubo en un primer momento con el caso de Dani Fiaño fue «unha mala comprensión do que é a política nosa» y ese malentendido se ha solucionado como suelen solucionarse todos, hablando.

«Creo que si, que o tema se solucionará», afirma Agrafojo. Ahora Daniel Fiaño tiene que hacer una propuesta de calendario para que la Universidade de Santiago valore el coste de los apoyos que necesita para cursar el máster que quiere hacer «e buscar financiamento para levalo adiante, que era a nosa intención dende o primeiro momento». Además de desplazarse con él desde A Coruña y hacer el camino de vuelta al final de la jornada, Daniel Fiaño necesita apoyo en el aula pero también para temas como la comida o cambios posturales en un momento dado, por ejemplo.

En la actualidad hay cuatro estudiantes en el campus de la USC que precisan de un asistente para integrarse en la vida universitaria. Uno de ellos, según explicaba la institución, sigue un sistema de copago: la universidad financia al asistente entre el miércoles y el viernes y el universitario se encarga del coste los lunes y los martes.