«Cuando baja el petróleo nunca repercute, pero si va para arriba siempre nos suben»

Álvaro Alonso Filgueira
ÁLVARO ALONSO FERROL / LA VOZ

SOCIEDAD

CESAR TOIMIL

Emilio Martínez recibió un correo en el que su agencia de viajes le notificaba que su paquete vacacional a Cancún había ascendido en 75 euros

31 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Después de llegar a trabajar a primera hora de ayer, sobre las siete de la mañana, el naronés Emilio Martínez abrió el correo y encontró una notificación de su agencia de viajes. La oficina de Nautalia de Ferrol le trasladó que su paquete vacacional a Cancún (México) había ascendido en 75 euros -25 por persona-, que se añadían a los 5.900 euros iniciales que habían pactado, por el alza del precio del petróleo.

Emilio contrató el viaje a mediados de abril para irse del 18 al 31 de julio. En ese momento ya abonó la mitad del importe, que incluye el vuelo de ida y vuelta A Coruña-Madrid-Cancún con la compañía Air Europa, la primera firma que ha dado el paso de subir los importes. «No nos queda otra que pasar por el aro y pagar, porque si no, no vamos. Buscaré algún derecho de pataleo, pero tal y como está la burocracia en estos casos, veo difícil conseguir algo», dice el naronés.

Llevaban mucho tiempo ahorrando para estas vacaciones de ensueño, por las que ahora tendrán que aportar más. «No nos vamos a echar para atrás, porque ya nos hemos hecho la ilusión de ir, sobre todo mi hija de 14 años», relata. Y eso que todavía teme que pueda haber algún añadido más al importe.

En este juego, Nautalia actúa de intermediario y está tratando por todas las vías de que sus clientes no tengan que abonar ese plus. «Nos informan constantemente de todo y, en este caso, también nos ayudan. Está claro que para ellos es todavía más marrón, porque tienen que dar la cara», aduce Emilio. Los 75 euros que va a perder, argumenta, le podrían valer «para el párking del aeropuerto o para una excursión allí, para cualquier cosa».

«En estas situaciones el consumidor siempre está desamparado. Cuando baja el petróleo nunca repercute, pero si va para arriba siempre nos suben. Es así y no queda otra que asumirlo, porque es una pérdida tremenda de tiempo y esfuerzo que no suele llevar a buen puerto», concluye.