Utilizan catalizadores de oro para generar con éxito reacciones en células vivas
SOCIEDAD
La revista «Nature Communications» publica el resultado de los investigadores de la USC
16 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Muchas de las enfermedades graves, entre ellas el temido cáncer, tienen su origen en alteraciones que se producen en el interior de la célula, la entidad más pequeña que puede considerarse viva. Es decir, conocer la célula y cómo funciona es uno de los retos de la ciencia, así como provocar mecanismos y reacciones que eviten estas fatídicas alteraciones.
Esto es precisamente lo que han logrado científicos del CiQUS, el centro de investigación en química biológica y materiales moleculares de la Universidade de Santiago, bajo la dirección del profesor José Luis Mascareñas. Mascareñas, uno de los pocos gallegos que cuenta con la competitiva ayuda Advanced Grant del Consejo Europeo, desarrolla esta investigación dentro del proyecto europeo Metbiocat, financiado con el Advanced Grant. Para abordar el tratamiento y diagnóstico de estas enfermedades que se originan en la célula hay que conocer a esta última. No solo conocerla sino desarrollar tecnologías que permitan alterar como se comporta.
Las enzimas son las encargadas de desencadenar estas transformaciones, por lo que los investigadores buscan enzimas artificiales que generen reacciones que no existen en la naturaleza. Y lo han hecho diseñando catalizadores químicos basados en metales que al introducirse en la célula viva funcionen como enzimas. En este caso los catalizadores son de oro, «es la primera demostración de que un catalizador de oro puede funcionar en células vivas», explica Fernando López, uno de los autores de este trabajo que acaba de publicar la revista Nature Communications.
Los catalizadores de oro multiplican las posibilidades de generar productos bioactivos dentro de la célula de manera totalmente controlada, ya que solo hay reacciones en presencia del catalizador. Junto a Mascareñas y López, científico del CSIC adscrito al CiQUS, desarrollaron el trabajo los investigadores posdoctorales Cristian Vidal y María Tomás, y el estudiante de doctorado Paolo Destito. Los investigadores ya habían logrado transformaciones químicas usando catalizadores basados en rutenio, y ahora lo han hecho con el oro, «y ya hemos conseguido que ambos puedan ejercer su actividad de forma simultánea, incluso dentro de las mismas células», destaca María Tomás.