Además, el informe revela que la edad media de los niños, niñas y adolescentes que sufren cualquier forma de violencia ha disminuido hasta los 11,5 años, cuando estaba en los 12,3. También ha descendido la edad a la que comienzan las agresiones hasta los 9,6 años, frente a los 10,4 del 2009. No solo eso porque ha aumentado el número de casos de entre los 5 y los 12 años. Los que están en esa franja han pasado de representar el 14,5 al 22 % del total de casos.
Atendiendo al género, de las cifras se desprende que en los últimos ocho años han aumentado tres puntos los casos de niñas víctimas de violencia, del 54,1 al 57,3 %, frente al 42,7 % de niños. Esto es debido, según explica ANAR, a que en el 75 % de los casos de abuso sexual las víctimas son niñas.