Los médicos aconsejan dar antes alimentos a los bebés para prevenir futuras alergias

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

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La excesiva limpieza y el retraso en empezar a tomar ciertas comidas han influido en el aumento de niños con intolerancias

21 ene 2018 . Actualizado a las 10:24 h.

Cada vez hay más niños con alergias alimentarias y esto ha hecho concluir a los médicos que lo conveniente es modificar la dieta de los bebés con el fin de obligar al sistema inmunológico a desarrollar tolerancias. Se trata de comenzar antes a introducir determinados alimentos complementarios, como las frutas o los cereales con gluten. Una tendencia que han iniciado ya muchos pediatras y que ha centrado la XIV Reunión sobre Controverisas y Novedades en Alergia de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología, que se celebra este fin de semana en Madrid. Allí la doctora Montserrat Fernández-Rivas explicó que la escrupulosa limpieza en la que crecen los niños y el retraso a la hora de introducir en la dieta de los bebés determinados alimentos pueden ser algunos de los motivos que han contribuido a que aumenten las cifras de pacientes con alergias. En los últimos veinte años se llegó a la conclusión de que lo adecuado era «evitar estrictamente» los alimentos susceptibles de evitar alergias -como los frutos secos- porque se consideraba que eso podría favorecer el desarrollo de tolerancias, «pero ahora sabemos que eso es falso», señaló Fernández-Rivas.

De ahí que en la actualidad se estén cambiando las guías de introducción de alimentos y la recomendación a las embarazadas y lactantes, que tienen que comer de todo. «Existen unos mecanismos inmunológicos que forman parte de la supervivencia de la especie, y que consiste en que lo que te metes por la boca y no te mata, provoca que tus sistema inmunológico desarrolle una tolerancia», indicó la doctora Fernández-Rivas.

En el caso de la alergia a los lácteos (la leche y el huevo son precisamente las intolerancias más habituales en los primeros años de vida), una de las terapias consiste en modificar la leche con un tratamiento térmico y mezclarla con un cereal. Progresivamente se va reduciendo el tratamiento térmico de la leche y la matriz del cereal, de forma que se comienza con galletas o magdalenas, por ejemplo, hasta llegar al yogur y la leche para inducir un desarrollo de la tolerancia.