Beatriz Domínguez Gil: «Galicia cuenta con unos equipos de trasplante totalmente excepcionales»

Raúl Romar García
R. Romar REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Ángel Díaz | EFE

La directora de la ONT dice que tienen una «larguísima lista de países que nos han pedido asesoramiento»

25 abr 2019 . Actualizado a las 19:27 h.

Evaluar problemas y buscar soluciones. Beatriz Domínguez Gil (Santiago, 1971) repite varias veces la misma frase durante la conversación. Es como si fuera una guía de la que no quiere alejarse ni por un momento. No tiene dudas de cuál es el camino a seguir. Como tampoco las tuvo cuando sustituyó en mayo del pasado año a Rafael Matesanz al frente de la Organización Mundial de Trasplantes (ONT). Relevar a la persona que creó un modelo copiado en todo el mundo podría suponer una enorme presión para cualquiera. Pero para ella no. Seguirá la ruta de su maestro con un único objetivo: seguir batiendo récords.

-España, líder mundial en trasplantes, suma 26 años de récords consecutivos. ¿El modelo está próximo a agotarse o aún tiene margen de mejora?

-Aún existe espacio para la mejora. De hecho, nos hemos planteado el objetivo para el año 2022 de alcanzar los 50 donantes por millón de habitantes (ahora son 46,9) y superar los 5.500 trasplantes. Pero, por supuesto, sabemos que llegará un momento en que la situación es muy probable que se estabilice. Mantener el nivel de excelencia ya es un reto.

-¿Cuáles son las vías de mejora?

-En primer lugar hay que consolidar y mejorar aquellas en las que llevamos trabajando muchos años. Por una parte, la colaboración con los servicios de urgencias y con otras plantas de hospitalización, porque sabemos que todavía hay personas que fallecen fuera de una uci con posibilidades de ser donantes. La segunda vía es la de la donación en asistolia (a corazón parado), que ha sido determinante en el incremento de la actividad en los últimos años, pero que aún tiene recorrido. Empezó, sobre todo, con órganos renales y lo que queremos es que se transforme cada vez más en una donación multiorgánica, de tal forma que podamos trasplantar con éxito otros órganos de estos donantes. También empezamos a trabajar en la utilización de órganos de afectados por el virus de la hepatitis C, gracias al éxito de los nuevos fármacos antivirales de acción directa

-La tecnología también les ayuda.

-Sí. Estamos trabajando ya en la posibilidad de que órganos que en principio no se consideran trasplantables puedan recuperarse con nuevas técnicas de preservación y transformarse en trasplantables. Empezamos con algunos hospitales que utilizan máquinas de preservación para recuperar pulmones, fuera ya del organismo. En trasplantes estamos en unos niveles de excelencia inimaginables para cualquier país del mundo, pero nuestro afán es siempre la mejora continua.

-Croacia, China, Alemania copian el modelo español. ¿Para cuántos países somos referencia?

-Yo diría que todos los países tienen a España como referente. La OMS, el Consejo de Europa y la Unión Europea consideran nuestro modelo como de referencia a exportar y también somos presidentes de la Red Consejo Iberoamericana de Donación y Trasplantes, a través de la que llegamos a 19 países, en los que formamos a sus profesionales en España como coordinadores de trasplantes. Hemos dado asesoría a países de los cinco continentes y, en Europa, prácticamente a todos, no solo a Alemania o Croacia. Portugal, por ejemplo, tiene un modelo muy parecido al español, pero Francia e Italia también tienen aspectos muy parecidos, al igual que el Reino Unido, que ha copiado buena parte de nuestro modelo, lo que les ha permitido incrementar la donación en un 50 % en cinco años. Tenemos un larguísimo listado de países de los cinco continente que nos han pedido asesoría.

-Como gallega y directora de la ONT. ¿Por qué cree que Galicia tiene el nivel más alto de negativas en la donación?

-Es una pregunta que debería contestar la coordinación autonómica, que, entre otras cosas, ha hecho un estudio específico sobre el tema, pero probablemente se deba a la concepción y a la cultura de la muerte que existe en Galicia. No obstante, no me atrevo a hablar de esto y lo único que puedo es constatar que la tasa de negativas en Galicia es, normalmente, la más alta del territorio nacional.

-También llama la atención que en Galicia, y más aún en Madrid y Cataluña, se reciban muchos más órganos que los que se donan a otras comunidades. ¿Por qué?

-Tiene que ver con la existencia en estas comunidades de centros de trasplante muy potentes y que son de referencia para otras comunidades para determinado tipo de órganos. Por ejemplo, en Galicia no se operan de trasplante pulmonar solo los gallegos, sino que también se interviene a personas de otros lugares. Y Madrid y Barcelona acumulan centros de referencia para otras autonomías.

-¿Galicia, entonces, es también una referencia?

-Sí. Esta situación pone de manifiesto que Galicia cuenta con unos equipos de trasplante absolutamente excepcionales y realiza todo tipo de actividad trasplantadora. Son equipos que, de verdad, e incido en ello, son excepcionales y que se han transformado en centros de referencia para otras comunidades para determinados tipos de trasplante. Galicia es referente en trasplante pulmonar y, para muchos casos, de corazón también.

Más información En la primera página del cuadernillo local.

«Los órganos artificiales permitirían solventar la escasez»

Beatriz Domínguez Gil sustituyó en el cargo de directora de la ONT a Rafael Matesanz, ya jubilado, en mayo del pasado año.

-¿No se sintió con una presión añadida cuanto sustituyó al que es el gran icono de los trasplantes?

-Cuando se me dice si quiero asumir la dirección, en primer lugar me siento muy honrada porque se piense en mi como sucesora de una persona tan emblemática y tan extraordinaria como es Rafael Matesanz. Puede ser inevitable que me comparen, pero la verdad es que yo no pienso en las comparaciones ni en el pasado, sino que estoy muy centrada en hacer las cosas bien. Mi objetivo cuando me levanto cada mañana es resolver problemas, buscar soluciones y pensar en cómo mejorar. No me permito pensar en otra cosa, aunque intento aprender de Matesanz y lo tengo de asesor cuando lo necesito.

-¿Cuál será el futuro de los trasplantes?

-Ahora mismo es difícil decirlo. Creo que las células madre es probable que nos ayuden, por una parte, a reducir la necesidad de un trasplante, resolviendo determinadas patologías sin llegar a necesitarlo. Es una posibilidad futura que esperemos que vea la luz. La construcción de órganos bioartificiales es otra línea de trabajo muy atractiva. A priori nos permitiría solventar la escasez de órganos y, por otra parte, al utilizar células madre del propio paciente, evitaríamos la necesidad de inmunosupresores de por vida.