Un robot español para que el pequeño Jens pueda andar

Cristian Reino / Colpisa BARCELONA

SOCIEDAD

Un hospital prueba el primer exoesqueleto infantil del mundo

30 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El pequeño Jens tiene 5 años. Sufre atrofia muscular espinal de tipo 2, lo que quiere decir que no puede caminar como todos los niños de su edad. Sin embargo, gracias a un exoesqueleto, una especie de robot fijado en sus piernas, ha conseguido caminar y apartarse por un momento de su silla de ruedas, que le acompaña a todos los sitios, a su colegio o a la piscina, a la que acude con sus compañeros de clase. Su vida ha cambiado de manera radical en los últimos meses. Por ello, ayer, ante una nube de fotógrafos durante la presentación del avance científico en el hospital de Sant Joan de Deu en Barcelona, hacía el signo de la victoria con su mano izquierda.

Su madre dice que la mirada le cambió el día que consiguió dar unos pasos. Con el exoesqueleto no se cansa e incluso le da más energía. Su padre aseguró que gracias a la ciencia al pequeño se le ha abierto el cielo. Cuando tenía un año, los médicos le diagnosticaron atrofia muscular espinal de tipo 2, la segunda enfermedad neuromuscular más frecuente en la infancia. Hay unas 1.500 familias afectadas en España.

Hasta ahora, los tratamientos consistían en intentar retrasar la aparición de complicaciones. No obstante, el hospital de Sant Joan de Déu en Barcelona presentó ayer el primer exoesqueleto del mundo que puede ayudar a andar a Jens y a todos los niños que sufren la misma enfermedad.

«Es un robot que se acopla al cuerpo del niño de tal manera que hay una interacción entre la persona y el robot. Es lo que se dice una interacción perfecta: la persona pone lo cognitivo y el robot el motor», según afirmó Elena García, co-fundadora de Marsi Bionics, una empresa creada a partir del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), en colaboración con la firma Escribano, que ha desarrollado el exoesqueleto.