Muere Jorge Zorreguieta, padre de la reina Máxima de Holanda

La Voz

SOCIEDAD

David Fernández | EFE

Tuvo estrechos vínculos con la dictadura militar de Argentina, motivo por el que el gobierno holandés lo separó de los actos oficiales de la hija

09 ago 2017 . Actualizado a las 10:15 h.

Jorge Zorreguieta, el padre de la reina Máxima de Holanda, ha fallecido este martes a los 89 años de edad a causa de un linfoma no Hodgkin, un tipo de cáncer que afecta al tejido linfático. La causa directa de la muerte ha sido una infección pulmonar, motivo por el que ingresó en el hospital «para recibir atención médica de enfermería y antibióticos endovenosos», según recoge el último informe médico difundido el lunes por el sanatorio Fundaleu.

La reina de los Países Bajos, en cuanto se le informó de la gravedad de la salud de su padre, voló de inmediato hasta el país latinoamericano. La intención de esta era regresar el lunes, pero decidió alargar la estancia debido a la delicada salud de su progenitor. El gobierno holandés, a pesar de haber prescindido de él en los actos oficiales, dio la noticia a través de un comunicado: «Su Majestad la reina Máxima y Su Majestad el rey Guillermo Alejandro comparten con gran tristeza que el Sr. Jorge Horacio Zorreguieta, el padre de la reina Máxima, ha fallecido en Buenos Aires el 8 de agosto de 2017 a la edad de 89 años. El Sr. Zorreguieta sufrió durante mucho tiempo linfoma no Hodgkin. El funeral se llevará a cabo en privado».

A pesar de que hacía años que padecía la enfermedad, Zorreguieta llevaba una vida aparentemente normal. Eso sí, alejado de la vida de su hija. De hecho, con motivo de su vinculación con la dictadura del país argentino, no acudió al enlace de su propia descendienta con el rey Guillermo Alejandro, así como tampoco a su ceremonia de coronación como reina. No eran muchas las veces que se dejaba ver. En algunas ocasiones del brazo de su esposa y en otras en autobús por las calles de la capital argentina. Pero no era lo frecuente. 

Pasado vinculado con la dictadura militar

Zorreguieta participó activamente en la desestabilización del gobierno de la presidenta María Estela Martínez de Perón y, más tarde, en el golpe de estado que la derrocó, dando paso a la dictadura militar denominada como Proceso de Reorganización Nacional (1976-1983). El padre de la reina de Holanda, tanto dentro de la dictadura como fuera, dedicó su vida al agro. Primero, fue subsecretario (1976-1979) y, más tarde, secretario de Agricultura y Ganadería (1976-1983) durante la dictadura de Jorge Rafael Videla. Con la instauración de la Democracia, tuvo que apartarse de la vida pública, motivo por el que se refugió en los negocios privados -también vinculados con el agro-. Fue presidente del Centro Azucarero (CAA), miembro de la Copal (Coordinadora de la Industria de Productos Alimenticios) y directivo destacado de la Sociedad Rural Argentina (SRA).

Aunque sus vínculos con la dictadura eran estrechos, estos no le trajeron problemas mayores. Eso sí, la relación con su hija se vio condenada a la distancia, ya que cuando Máxima comenzó la relación con el heredero de la casa de Orange, el pasado de Zorreguieta pasó a ser una cuestión de estado. Uno de los expertos del gobierno holandés en asuntos latinoamericanos, Michiel Baud, concluyó que era «casi seguro» que los funcionarios como él «no estuvieran involucrados personalmente en la represión». Sin embargo, el especialista explica, también, que era posible que, de la misma forma, conociese las violaciones de los derechos humanos en este país. «Debió pensar que las cosas no estaban tan mal. O que era necesario un poco de represión para solucionar el problema del caos y del orden», apuntó Baud.