Tres años y cuatro meses de cárcel para el creador de «la ballena azul»

La Voz REDACCIÓN

SOCIEDAD

Rusia y otros países en los que varios jovenes se suicidaron incitados por el macabro juego han mostrado su indignación con la benévola condena

22 jul 2017 . Actualizado a las 20:27 h.

Philipp Budeikin, el creador del macabro juego de la ballena azul que indujo al suicidio de 17 jóvenes rusos y algunos más en otros países, ha sido condenado a tres años y cuatro meses de cárcel. El joven ruso de 22 años reconoció durante el juicio su responsabilidad y se mostró arrepentido de su conducta, lo que le sirvió para que el juzgado de Tobolsk, la capital histórica de Siberia, le impusiera una condena más benévola a la esperada.

La sentencia ha caído como un jarro de agua fría en Rusia y en el resto de países donde la ballena azul se ha cobrado alguna víctima. Según el Daily Mail, el motivo que ha provocado que la condena haya sido tan leve es que Philipp Budeikin ha sido juzgado por el caso de dos jóvenes que, incitadas por el juego, intentaron suicidarse pero fracasaron en su tentativa. A pesar de considerarse el ideólogo de la ballena azul, el tribunal no ha podido probar su vinculación con el suicidio de 17 jóvenes rusos, lo que le hubiera supuesto una condena mayor.

Durante los tres años y cuatro meses de cárcel que Philipp Budeikin pasará en la cárcel irán acompañados de un régimen relativamente permisivo, ya que el joven podrá pasar temporadas en su domicilio junto a su familia bajo arresto domiciliario.

Philipp Budeikin fue detenido en noviembre del 2016 por su relación con el macabro juego. Justo antes de que la policía le diera caza, este aspirante a psicólogo reveló en una entrevista algunos de los motivos que lo llevaron a idear la ballena azul: «El objetivo del juego es limpiar la sociedad de gente y residuos biodegradables que no tienen ningún valor». El joven reconoce además su influencia directa en 17 suicidios: «Murieron felices, porque la ballena azul les dio lo que no tenían en la vida real: calidez, comprensión y comunicación».

El juego de la ballena azul está formado por cincuenta macabras pruebas que van desde autolesionarse hasta pasar varios días sin dormir. El suicidio es la prueba final.

Aunque según las palabras de su creador, el reto arrancó en Rusia en el 2013, no fue hasta principios de este año cuando la ballena azul traspasó fronteras. El primer caso que se conoció en España fue el de una joven de 15 años que terminó ingresada durante dos semanas en un hospital psiquiátrico de Barcelona.

Casi al mismo tiempo, en Sudámerica, los gobiernos de países como Brasil, Bolivia, Colombia, Chile o Uruguay detectaron el suicidio de varios jóvenes y alertaron a las autoridades de la presencia en las redes sociales de cuentas encargadas de fomentar la propagación de la ballena azul.