Galicia se apunta a los voluntariados de asistencia social, educación, salud o comunicación en los que desconectar cooperando
19 jul 2017 . Actualizado a las 17:31 h.No hay nada más satisfactorio que disfrutar de un viaje y, de paso, poder ayudar a alguien. La oportunidad de vivir una experiencia única a través de unas vacaciones solidarias cooperando donde más se necesita, es una realidad que ya es tendencia en muchos países. España se involucra cada vez más con la causa y, de hecho, en Galicia ya se apuesta también por iniciativas de voluntariado de asistencia social, educación, salud o comunicación, con mucha presencia en países de África y América Latina.
La pasión por la cooperación y las ONG's provocan que la gente, cada vez con más hincapié, apueste por este tipo de viajes para sus vacaciones. El perfil que se busca, normalmente, depende mucho de la plaza que se oferta. Es decir, si se quiere ir a un país donde la sanidad es precaria, es probable que se le de más importancia a una solicitud de un médico. Aún así, este criterio no es excluyente y todo el que quiera colaborar, será bienvenido. Como norma básica, es suficiente con tener 18 años y, si el país lo requiere, tener un nivel medio de inglés.
Una de las características diferenciadoras de estas iniciativas es que se intenta, en la medida de lo posible, adaptarse a las necesidades del viajero. Por ello, existen salidas a lo largo de todo el año, adaptándose a las circunstancias del voluntario y del lugar en el que se desea realizar la estancia.
De primera mano
Las iniciativas solidarias llegan, también, a Galicia. Es el caso de Horizon, un proyecto pionero de la comunidad que gestiona viajes a las personas que quieran cooperar y que no hayan encontrado la forma ni el tiempo para hacerlo. Desde el traslado del aeropuerto hasta el alojamiento y las comidas, están incluidos en los precios del pack.
Un viajero y el ahora promotor de Horizon -que se presentará el próximo 28 de julio- Ramón Couto, explica que las iniciativas se realizan a lo largo del año, en función de las demandas del voluntario y, además, de que existen momentos más aptos para el desarrollo de ciertas actividades. «En proyectos con determinados animales hay partes del año donde es mejor visitarlos, como por ejemplo con las tortugas en Nicaragua o Costa Rica. Igual que los que realizamos con los niños, evidentemente, que son cuando no tienen colegio».
A pesar de que en la actualidad Horizon ya tenga organizadas iniciativas de viajes en más de una decena de países -entre ellos Costa Rica, Guinea Bissau, Chile, Perú o Panamá- desde la organización se pretende ampliar el número de lugares a los que poder acceder. Según ha indicado Ramón Couto, «Lo de Tailandia está casi hecho. Existe también la posibilidad de ampliar a México y a Malasia», anuncia su impulsor.
Y es que tres años -y meses esporádicos- viajando por todo el mundo no le han llegado, ya que su intención es, por encima de todo, que los proyectos no sean «una decepción» y poder garantizar que «la experiencia sea increíble». Por esto, busca siempre conocer de primera mano antes de cerrar cualquier tipo de iniciativa. «Ya he estado en la práctica totalidad y los que no, los visitaré en septiembre», indica.
Con su espíritu viajero aún presente y «después de vivir la experiencia, de tener la suerte de trabajar con ONG's, he visto que podía seguir aportando a otra gente, permitiéndoles que pudiesen hacer lo mismo que yo en cortos períodos de tiempo», explica el promotor. Ahora, desde una perspectiva completamente diferente, se lanza a la aventura de gestionar un proyecto pionero en Galicia que no solo permite desconectar en países con culturas tan dispares, sino que además da la oportunidad de sentir en la piel una de las acciones más reconfortantes que pueda existir: la solidaridad.