Francia establecerá la obligación de vacunar contra once enfermedades

r. r. garcía REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

SANDRA ALONSO

La cada vez menor inmunización ha hecho rebrotar el sarampión en el país

08 jul 2017 . Actualizado a las 09:46 h.

Cuatro de cada diez franceses dudan de la seguridad de las vacunas. Y Francia es uno de los países donde el peligroso movimiento antivacunas ha alcanzado un mayor predicamento. Suficientes argumentos como para el Gobierno haya decidido actuar ante una de las mayores amenazas de la salud pública. A partir del próximo año establecerá la vacunación obligatoria contra once enfermedades, con lo que seguirá el ejemplo de Italia, que adoptó la misma medida en mayo pasado. Así lo anunció ante la Asamblea Nacional el primer ministro galo, Edouard Philippe.

Es también la respuesta ante el número creciente de casos de sarampión que se han registrado en el país a causa de la decisión de muchos padres de no inmunizar a sus hijos. Desde el 2008 han muerto en el país al menos 10 personas a causa de esta enfermedad. Entre enero y febrero de esta año también se registraron en el país varios brotes que afectaron a 79 personas.

«Es intolerable y no podemos aceptar que niños y adolescentes fallezcan por no haber sido vacunados», destacó Agnès Buzyn, la ministra de Sanidad de Francia.

Con esta medida, el Gobierno galo obligará a inmunizar a los menores de edad con ocho vacunas que hasta ahora solo recomendaba (tos ferina, hepatitis B, infección por Haemophilus influenzae, neumococo, meningitis C y el sarampión, las paperas y la rubeola). Actualmente, solo tres son obligatorias en Francia para los niños de menos de dieciocho meses de edad (difteria, tétanos y poliomielitis).

«Es intolerable y no podemos aceptar que niños y adolescentes fallezcan por no haber sido vacunados»

Son las inmunizaciones habituales que se recomiendan en los calendarios de la OMS y que también se aplican en España, aunque todas de forma voluntaria. De hecho, ni los expertos ni las autoridades sanitarias españolas se han planteado la obligatoriedad. Y no lo hacen porque, de momento, es uno de los países con un mayor porcentaje de vacunación, que supera el 95 %.

Pero en Francia, al igual que en Italia, los movimientos antivacunas son más fuertes y son los que han provocado este alarmante descenso en la protección contra las infecciones. Muchos de los detractores encuentran sus argumentos en el ampliamente desacreditado estudio del médico británico Andrew Wakefield, que en 1988 creyó haber encontrado un vínculo entra la vacuna contra el sarampión, las paperas y la rubeola con el desarrollo del autismo. Pero nunca se encontró tal relación.

Francia aún tendrá que concretar cómo aplicará la obligatoriedad, pero, en principio, la normativa vigente en Italia desde mayo es más dura, ya que también establece multas para los padres que no cumplan con el calendario oficial e incluso se impide escolarizar a sus hijos. Eslovenia es otro de los países que ha optado por sancionar a las familias. Australia, por contra, ha optado por primar con algo más de cien euros los padres que vacunen a sus hijos.