Crean un robot para ayudar en casa a las personas que han sufrido un daño cerebral

La Voz

SOCIEDAD

MORELL | EFE

La tecnología desarrollada por la Universidad de Alicante, que integra realidad virtual, interfaces 3D y sensores pretende ayudar a mejorar la calidad de vida de estas personas en su entorno

01 may 2017 . Actualizado a las 08:44 h.

La Universidad de Alicante (UA) trabaja en el diseño de un sistema tecnológico para mejorar la autonomía de las personas con daño cerebral adquirido y dependientes en su integración social, un proyecto que incorpora un robot que actuaría de asistente y estimulación interactiva en el hogar.

Este proyecto es la continuación de otro anterior que terminó con total éxito en el 2016 y cuyo resultado fue la creación de un innovador dispositivo multisensor capaz de adaptarse de forma personalizada a las necesidades de los pacientes discapacitados para que puedan realizar terapias de rehabilitación, tanto motoras como cognitivas.

A partir de esta tecnología, que integra aplicaciones de realidad virtual e interfaces 3D, así como sensores para monitorizar los movimientos de las personas, la UA desarrolla desde enero un proyecto de investigación básica, denominado Retogar, para abordar un nuevo reto: ayudar a mejorar la calidad de vida de estas personas en su entorno.

Una vez que finalizan su período de rehabilitación clínica, las personas con daño cerebral adquirido deben continuar su terapia cuando regresan a su hogar, lo que, en función de su grado de discapacidad, requiere de una continua atención, según ha comentado el director del citado instituto y uno de los investigadores principales del proyecto, Miguel Cazorla.

El objetivo que persigue el trabajo de la UA es ofrecerles una mayor autonomía en esa fase de su rehabilitación, para lo que los investigadores diseñan un sistema de ambiente inteligente de monitorización del entorno, basado en sensores visuales 3D de bajo coste, que permita realizar la localización y seguimiento de estas personas en su hogar.

El modelo de investigación se basa también en cámaras y tecnología infrarroja para «saber en todo momento dónde está el paciente en la casa».