La familia de la mujer de 64 años que dio a luz en Burgos intentó que la incapacitaran para impedir un embarazo

La Voz LA VOZ | AGENCIAS

SOCIEDAD

Los familiares recurrieron a la justicia y llegaron incluso a pedir que le retiraran el pasaporte para que no pudiera ir a Estados Unidos, donde logró quedarse embarazada mediante fecundación in vitro

17 feb 2017 . Actualizado a las 09:56 h.

Esta semana Mauricia I.A., de 64 años de edad, dio a luz a gemelos, un niño y una niña, en el Hospital Recoletas de Burgos después de conseguir quedarse embarazada mediante un tratamiento de fecundación in vitro en Estados Unidos. Ya se la había retirado la custodia de una niña que tuvo a los 58 años y su familia intentó impedir un nuevo embarazo por todos los medios, incluso recurriendo a la Justicia, según desvela hoy El Mundo

Los hermanos pidieron ante los Tribunales que se incapacitara A Mauricia, alegando que padece esquizofrenia, y que nombrara a uno de ellos como tutor legal, revela el diario madrileño. También solicitaron que se le retirara el pasaporte para que no pudiera viajar a Estados Unidos. La familia perdió los pleitos y al final Mauricia, nacida en 1952, pudo viajar fuera de España para someterse a una fecundación in vitro en la que logró quedarse embarazada. 

Antes había intentado realizar un tratamiento en una clínica privada en Barcelona pero se lo denegaron. 

Seguimiento de los gemelos

La Junta de Castilla y León ya ha anunciado que realizará un seguimiento de la mujer y de sus dos hijos ya que en el año 2012 se le retiró la custodia de la primera hija que tuvo, ya con 58 años, por una situación de desamparo.

Los equipos de psicólogos, asistentes sociales y jurídicos se han puesto a trabajar de inmediato y someterán a la madre a un seguimiento a fin de estudiar su situación personal. El objetivo es asegurar que los bebés, un niño y una niña que se encuentran en buen estado de salud, no corren ningún riesgo, habida cuenta de los antecedentes de la madre.

Desamparo de la hija que tuvo con 58

La Junta de Castilla y León le retiró la custodia en 2012 de su primera hija, tras declararse una situación de desamparo. Se detectaron problemas de aislamiento, higiene deficiente y absentismo escolar.

La niña estuvo un año a cargo de los servicios sociales en Burgos hasta que el verano pasado se hizo cargo de ella una sobrina canadiense de Mauricia, según informa El Mundo. «Mauricia tiene permitido hablar con ella 15 o 20 minutos a la semana y también están en contacto por internet», cuenta un vecino.