Polémica por el supuesto desvío a la reventa de entradas de Guns N' Roses

Cláudia Morán

SOCIEDAD

LUIS EDUARDO NORIEGA A. | EFE

Los seguidores de la banda, indignados después de que los pases «baratos» se agotaran en media hora en Ticketmaster

09 dic 2016 . Actualizado a las 17:08 h.

Continúa la polémica en torno a la reventa de entradas para conciertos y espectáculos a través de grandes plataformas. Una investigación abierta en Italia y una denuncia de Facua sobre los próximos conciertos del artista Bruno Mars encendieron todas las alarmas: la promotora LiveNation y la distribuidora Ticketmaster están en el ojo del huracán por haberse beneficiado, presuntamente, de la reventa de entradas al mercado secundario. Un mercado en el que el precio de los pases se multiplica.

Las entradas para ver a Guns N' Roses el 30 de mayo en Bilbao y el 4 de junio en Madrid salieron a la venta este viernes a las 10 de la mañana. En menos de 30 minutos, según denunciaron varios usuarios a través de las redes sociales, las más baratas, de entre 63 y 119 euros, se agotaron en la plataforma Ticketmaster. Solo quedaron pases de 181 euros para ver a la banda estadounidense en el Estadio Vicente Calderón y a partir de 297 euros para el de San Mamés.

Al mismo tiempo, el portal de reventa de entradas Seatwave, que pertenece al mismo conglomerado internacional que Livenation y Ticketmaster, se pusieron a la venta un centenar de entradas para el concierto de Bilbao y unas 700 para el de Madrid. En el primer caso, los precios varían entre los 238,91 y los 449 euros, mientras que en el segundo, el coste oscila entre los 139 y los 160 euros. Al percatarse de ello, varios usuarios acusaron a las plataformas de hacer negocio con la reventa.

Tanto el presidente de Livenation en España, Roberto Grima, como el director ejecutivo de Ticketmaster, Eugeni Casamiglia, aseguraron en su momento que «tienen prohibido» desviar entradas al mercado secundario. 

Sin embargo, el reportaje de la televisión italiana en el que el responsable de Livenation en el país mediterráneo reconocía esta práctica pone en la picota el modus operandi de ambas plataformas. El mismo programa aseguraba que estas se quedaban con ni más ni menos que el 90 % de los recargos.

Por otro lado, el portavoz de Facua Rubén Sánchez afirma que la situación «huele bastante mal en la práctica», algo que a la organización le «da a entender que hay un negocio paralelo» en base a los «colapsos y problemas» que «habitualmente» presenta Ticketmaster por la velocidad a la que se agotan las entradas y lo rápido que aparecen en las plataformas de reventa.

Algunas soluciones a este problema las plantea la Asociación de Promotores Musicales (APM) como, por ejemplo, restringir el número de entradas que puede adquirir cada comprador o la introducción de entradas nominales con las que se requiera presentar el DNI para poder acceder al concierto.