Algo que celebrar

Beatriz Pallas ENCADENADOS

SOCIEDAD

27 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Halloween llegó primero. La televisión y el cine ya nos habían moldeado lo suficiente cuando los niños, de pronto, empezaron a disfrazarse en pleno octubre y la costumbre nos sonó lejanamente familiar. Más tarde llegó el black friday y nos hizo un truco o trato que asumimos en tiempo récord, seducidos por las rebajas importadas y los bajos precios. Solo nos falta, para tener el lote completo, aceptar ahora la fiesta de Acción de Gracias, una celebración a la que películas y series nos tienen más que habituados.

En episodios coyunturales anclados por el calendario, y que no siempre pueden presumir de ser los mejores, hemos aprendido el reflejo que la ficción ofrece de esta conmemoración. Desde El príncipe del Bel Air, a Friends y The Big Bang Theory nos enseñaron que los hombres ven fútbol en la tele mientras las mujeres preparan la salsa de arándanos. El ala oeste de la Casa Blanca nos contó con detalle el ritual del indulto del pavo. Y Bart Simpson pudo contemplarse a sí mismo en televisión convertido en uno de los gigantes muñecos de helio que desfilan en la gran parada comercial de unos grandes almacenes. Para reflejar con fidelidad la realidad de muchos encuentros familiares, los personajes de Cómo conocí a vuestra madre también celebraron la fiesta liándose a tortas.