Ubicado en una zona rehabilitada por los Juegos Olímpicos, en un edificio de cinco plantas, 26.000 metros cuadrados y 4,5 millones de litros de agua salada
16 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.El esqueleto gigantesco de una ballena jorobada cuelga del techo y recibe a los visitantes del mayor acuario de Sudamérica, que abrirá sus puertas el 9 de noviembre en el corazón de la renovada zona portuaria de Rio de Janeiro. Esta ballena adulta, de 13 metros y 37 toneladas, quedó varada en la playa de la Macumba en junio del 2014, «probablemente después de haber sido golpeada por un buque, porque le faltaba una aleta», explicó el biólogo marino Marcelo Szpilman, creador de esta nueva atracción bautizada como AquaRio.
Hasta ahora, la bulliciosa ciudad costera, que es visitada cada año por casi nueve millones de personas, no contaba con un acuario, una deuda que pronto será resuelta. Ubicado en una zona rehabilitada por los Juegos Olímpicos, en un edificio de cinco plantas, 26.000 metros cuadrados y 4,5 millones de litros de agua salada -equivalente a dos piscinas olímpicas- AquaRio «quiere ofrecer al público una sensación de inmersión total», subraya Szpilman.
Además de los 28 acuarios con los que cuenta AquaRio, atracción principal es un túnel de paredes acrílicas de 20 metros de largo y dos de ancho que dan la impresión de estar inmerso en millones de litros de agua y rodeado de tiburones.