Un centro comercial gallego para China

Dolores Vázquez A CORUÑA / LA VOZ

SOCIEDAD

CESAR QUIAN

Un grupo de arquitectos coruñeses son distinguidos en un certamen internacional por el concepto de una superficie de compras en la que priman los espacios verdes

16 jun 2016 . Actualizado a las 08:53 h.

En la meca actual del mundo del comercio, en China, un grupo de arquitectos coruñeses ha logrado triunfar con un replanteamiento de centro comercial. Lo han hecho defendiendo la conversión de este tipo de espacio comercial en un gran parque urbano, huyendo de las estructuras cerradas que priman en la actualidad y que están enfocadas únicamente en guiar al ciudadano por un pasaje de compras. Frente a ello apuestan por una vertiente de espacio social y disfrute ciudadano, donde se prima la relación directa con el entorno natural y su potencial para regenerar el oxígeno.

Bajo el título Why not?, su idea logró una mención de honor en un certamen impulsado por la revista UEDmagacine y el grupo Wanda y en el que actuaron de jurado personalidades de la arquitectura a nivel internacional como Daniel Libeskind, Benedetta Tagliabue, David Malott, Lai Jianyan, Anthony LaMolinara, Inaki Abalos, René-Henri Arnaud y Will Hosikian.

Desde el laboratorio de trabajo PØST arquitectura, que es como se denomina el equipo formado por Sandra González Álvarez, Miguel Comesaña Alonso, Alberto Fuentes Valcárcel, Ramón López González y Maite Fraga Lamas, se muestran satisfechos por lograr un reconocimiento por un trabajo que reconocen que presentaron sin acabar, debido al exiguo plazo temporal para desarrollarlo, que fue de un mes, y en el que compitieron con otros 2.000 participantes con un diseño inspirado en el Libro de los pasajes, del ensayista alemán Walter Benjamin, en el que defienden el diálogo del entorno construido con el medio natural.

Sandra González Álvarez, de quien un anterior trabajo firmado junto a Alberto Fuentes ya había sido seleccionado en otro concurso en China, reconoce que su propuesta de parque vertical tenía como principal motivación lograr el contacto con Wanda, uno de los gigantes inmobiliarios en estos momentos, pero finalmente no pudieron ir a recoger el galardón, que consistía en la certificación y varios números de la revista china.

«Estamos inmersos agora noutro concurso para China, a ver se a terceira vai a vencida e imos, presentámonos a todo o que sae porque a figura do arquitecto agora é a máis denostada da sociedade, aínda que nós, que somos novos, non temos culpa de nada», explica González Álvarez.