Los gallegos son «marquistas» e invierten más en zapatos y bolsos

Noelia Silvosa
noelia silvosa A CORUÑA / LA VOZ

SOCIEDAD

EDUARDO PEREZ

Cristina Mesa, del despacho Garrigues, habló de Derecho y Moda en Marineda

27 may 2016 . Actualizado a las 11:33 h.

Marquistas, artistas en la combinación de prendas de lujo con otras low cost y amantes de los complementos. Estas son algunas pinceladas del perfil del comprador gallego de textil observado por Cristina Mesa, asociada sénior del departamento de Propiedad Industrial e Intelectual y corresponsable de la industria de Moda y Derecho en Garrigues. La experta fue una de las ponentes en A Coruña de la Jornada Galicia Fashion Law, que tuvo lugar ayer en Marineda City, el primer evento jurídico sobre el diseño y la moda que se celebra en Galicia.

Mesa asegura que por estos lares no hay demasiadas demandas por plagio entre firmas. «No es habitual. Si se considera que una imitación ha ido más allá se suele mandar un requerimiento de forma amistosa, y en la mayor parte de las ocasiones se retira la demanda», indica. La letrada ofrece además otro dato significativo, ya que confirma que la mayor parte de las demandas por plagio se producen entre firmas de lujo, y no entre estas y otras low cost, como pudiese parecer. No obstante, no resulta fácil distinguir entre plagio y tendencia. «A veces se traspasa la línea, pero creo que empresas como Inditex innovan. Ellos hacen marca y, desde mi punto de vista, han democratizado la moda y han innovado. Lo verdaderamente innovador de Inditex son sus procesos de producción y distribución. Claro que se inspira en otras marcas, pero también en las tendencias de la calle, que es donde son realmente buenos».

Plagio o no, esa es la cuestión

No cabe duda de que esa diferenciación es un trabajo difícil para el juez. «Al final son ellos quienes tienen que aplicar el Derecho para la disputa sobre la creación del producto en sí. Y aquí hablamos tanto de marcas como de propiedad intelectual», aclara la abogada, que hace una puntualización interesante: «Aunque no lo parezca, tiene más valor la marca del producto que el diseño en sí. De ahí la importancia de tener un monopolio». Y la única forma de tenerlo es tramitar una patente. «Es importante para que no te plagien y, al menos, intentar recuperar la inversión», dice Mesa, que sin embargo señala que también existe protección para el producto no registrado: «A diferencia de lo que ocurre en otros sectores, la duración de los diseños en moda es muy breve. Hay firmas que renuevan colección cada dos semanas, por lo que no merece la pena tramitar la patente. La UE, que es muy proteccionista con los diseñadores, creó la figura del diseñador comunitario no registrado. Por el mero hecho de idearlos, se logra protección por un período de tres años frente a las copias que se produzcan en ese período de tiempo», apunta. Pero, ¿es marquista el comprador en Galicia? Mesa lo tiene claro: «Sí, y es curioso que el mercado gallego mezcla. Utiliza prendas low cost pero no renuncia a las marcas. En zapatos y en bolsos es en lo que más dinero gastan los gallegos», asegura. La experta termina hablando de la potente relación entre tecnología y moda. «Se ha visto con los wereables, como son los relojes inteligentes. En otros productos va más allá, como el sujetador capaz de detectar el cáncer de mama o los zapatos de tacón que se moldean a tres, cinco o diez centímetros. De ahí lo vital de proteger esas innovaciones», recuerda. Pues a patentar.