Un «acto libre para adultos» en el que vende semillas, un libro y su «verdad» sobre la gripe

c. barral pontevedra / la voz

SOCIEDAD

La conferencia de Josep Pàmies llenó ayer el paraninfo del Sánchez Cantón de Pontevedra.
La conferencia de Josep Pàmies llenó ayer el paraninfo del Sánchez Cantón de Pontevedra. ramón leiro< / span>

07 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La asociación 4Ponlas de Pontevedra, organizadora de la conferencia que ayer pronunció Josep Pàmies en el IES Sánchez Cantón, denunció presiones para evitar que la charla se celebrara. «É un acto libre para adultos, fóra das actividades escolares, a entrada é de balde, e pode ir ou non quen queira. Se alguén non está de acordo co señor Pàmies está no seu dereito, nós só queremos escoitalo e compartilo con que lle apeteza». Así lo expresaba horas antes en su Facebook 4Ponlas, que se define como un grupo de productores de huerta, artesanos, músicos y asociaciones con el espíritu común de fomentar el consumo y la producción responsable.

Tras la polémica creada, la dirección del instituto se vio obligada a aclarar que se limitó a colaborar con el Concello de Pontevedra en la cesión de espacios, matizando que la charla no formaba parte de las actividades para su alumnado. El Ayuntamiento, por su parte, confirmó que solicitaron al IES la cesión del paraninfo al tener ocupado el Teatro Principal, pero se desvincularon de la organización. Y desde la Xefatura Territorial de Educación indicaron que «al no realizarse en horas lectivas ni estar dirigido a los alumnos, Educación no va a prohibir nada», indicó un portavoz a preguntas de La Voz.

Venta de semillas y libros

Controversias al margen, la visita de Pàmies llenó el paraninfo del instituto, con capacidad para 390 personas. Hubo que abrir las puertas y permitir que la gente más joven se sentara en el escenario para dejar sitio a los mayores. En la entrada, en una mesa se vendían semillas de varias plantas y su libro Una dulce revolución. Un miembro de 4Ponlas presentó al conferenciante como un «agricultor reivindicativo» que se hizo «activista».

Pàmies tomó la palabra e inició su intervención dando las gracias a Pontevedra por permitir su charla, prohibida en otros lugares, dijo. Echó mano de la célebre frase de Alfonso Guerra «El que se mueva no sale en la foto» para definir la situación. El campesino catalán animó a la gente a ser autosuficiente y a no respetar siempre una «ley injusta» que beneficia «a los corruptos»: «Hay que expulsar de nuestras vidas el imperio farmacéutico, el de los bancos y optar por la desobediencia».

Pàmies también criticó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) alerte ahora, 20 años después, de los efectos cancerígenos de la carne procesada y la acusó de haberse convertido en un «organismo regulador de medicamentos básicamente». Venía a hablar de las «verdades ocultas en alimentación y salud» y, entre ellas, cuestionó abiertamente la efectividad de la vacuna contra la gripe. Defendió la sanidad pública, pero censuró que cuando se fracasa se pretenda curar con la ingesta de treinta pastillas diarias.