Condenados tres invitados a una boda por una pelea a raíz de una canción vasca

La Voz CARLOS LÓPEZ | EFE

SOCIEDAD

La novia pidió una canción en euskera y tras ponerla el novio le gritó al pinchadiscos: «Quita esa música etarra y mortuoria»

17 sep 2015 . Actualizado a las 19:47 h.

«Quita esa música etarra y mortuoria». Esta orden dada al pinchadiscos de una boda por el novio, revocando una petición de la novia para que su familia bailara un canción en euskera, desembocó en riña tumultuaria entre los invitados, tres de los cuales han sido condenados este jueves en San Sebastián, en un juicio en el que el pinchadiscos ha sido absuelto.

Era ya entrada la madrugada del 28 de octubre del 2013. Tan sólo faltaban quince minutos para la conclusión del baile de la boda, que había reunido en el donostiarra hotel de Londres a miembros de dos familias guipuzcoanas, una de ellas con varios invitados de Valladolid, cuando la novia solicitó al disyóquei que pusiera la canción Kalanbreak del grupo Gozategi Anaiak para sus allegados.

Menos de 20 segundos después, el novio, que previamente había pactado con el pinchadiscos que no pusiera ni una sola canción en euskera, se dirigió a él y, zarandeándole y agarrándole del brazo, le exigió que la quitara porque de lo contrario no le pagaría. «Le pedí que no me hiciera pasarlo mal y le advertí de que se podía meter en un lío porque me la había pedido la novia», ha recordado este trabajador, al que Amante bandido le pareció un tema adecuado para templar ánimos.

Lejos de lograr su objetivo, la canción de Miguel Bosé «calentó a la gente», que comenzó a increpar al pinchadiscos:. «¿Quitas en euskera y pones esto?», llegó a escuchar entre insultos mientras abandonaba su estrado para dar explicaciones a un hombre que le «increpaba» de forma airada por lo sucedido.

«En ese momento -aclara el pinchadiscos-, noté un empujón y un puñetazo, y la boda se acabó para mí. Recogí mis gafas del suelo, quité la música y pedí al encargado que llamara a la policía porque quería denunciar» lo sucedido. «Ahí fue cuando empezó 'todo Dios' a pegarse», explica el agredido.

A partir de ahí tuvo lugar una escena digna de un «gag» del programa vasco de humor Vaya Semanita, con un primer enfrentamiento entre los invitados en el mismo salón de baile del hotel y una segunda parte en el exterior del establecimiento que concluyó con la llegada de varios ertzainas de paisano, que fueron agredidos por los acusados, aunque durante el juicio no se han conocido más detalles de lo ocurrido, ya que los procesados se han mostrado conformes con las penas solicitadas por la Fiscalía.

No obstante, minutos antes de la vista, uno de los abogados del caso ha descrito a los periodistas lo sucedido como «una riña tumultuaria en la que participaron decenas de personas», en la que «se montó un guirigay de mucho cuidado» y varios ertzainas de paisano fueron agredidos porque los encausados «en ningún momento supieron que eran policías».

En el procedimiento judicial iniciado posteriormente por estos fueron imputados el disyóquei y tres invitados de la familia de la novia, dos de ellos (padre e hijo) acusados de golpear a unos ertzainas y un tercero por golpear a otro invitado.