Francia acelera para evitar el fracaso de la cumbre del clima

Raúl Romar García
r. romar REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

JACKY NAEGELEN / POOL | EFE

Es la primera vez que el país anfitrión de la conferencia mundial reúne a los ministros de Exteriores al margen de la ONU

07 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Francia quiere evitar a toda costa el ridículo ocurrido en Copenhague en el 2009, cuando 195 países fueron incapaces de alcanzar un mínimo acuerdo para conseguir un nuevo consenso mundial contra el cambio climático que refuerce o sustituya el Protocolo de Kioto contra el cambio climático, que entró en vigor hace diez años y que expirará en el 2020, aunque su alcance es ahora muy limitado porque en la actualidad el esfuerzo de reducción de gases de efecto invernadero recae casi en su totalidad en la Unión Europea. Si la cumbre celebrada en Dinamarca hace seis años se presumía histórica, aunque las expectativas se frustraron, este adjetivo se guarda ahora para la que tendrá lugar en París entre el 30 de noviembre y el 10 de diciembre. Pero las negociaciones previas, impulsadas por la ONU, están en punto muerto, lo que ha obligado al Gobierno galo a asumir un protagonismo que hasta el momento no había ejercido ningún país con anterioridad.

Por primera vez, el país anfitrión ha convocado una reunión con los ministros de Asuntos de Exteriores de 53 países para impulsar las negociaciones y alejar la sombra de un previsible fracaso. De la reunión, que comenzó ayer y que se prolongará hasta hoy, no está previsto que salga un acuerdo en concreto, pero sí que se aceleren las negociaciones para intentar que en el mes de octubre se apruebe un primer borrador que sirva de base para el hipotético protocolo que se decidirá en diciembre.

«A paso de tortuga»

El encuentro de ayer se celebra al margen de la ONU, el organismo que lleva el peso de las deliberaciones, y tiene lugar tres días después de que el propio secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon reconociese que las conversaciones para alcanzar un acuerdo que frene el cambio climático van «a paso de tortuga». Estas declaraciones las hizo el pasado viernes, el día que concluyó en Bonn (Alemania) una asamblea oficial con la presencia de delegados de 195 países y que pretendía servir de preparación para la cumbre de París. De esta cita no salió ningún avance claro, de ahí que el ministro de Asuntos Exteriores francés, Laurent Fabius, decidiese asumir el protagonismo y citar a sus colegas de otros países. «Si queremos hacer de París un éxito y un punto de inflexión es necesario aprovechar cada ocasión», dijo ayer Fabius, quien expresó su confianza en que «con diálogo vamos a alcanzar nuestro objetivo».

El objetivo es alcanzar en diciembre un acuerdo de reducción de emisiones que permita que el incremento de temperaturas no supere los dos grados a fin de siglo, el límite a partir del cual los expertos consideran que el cambio climático será irreversible y con efectos catastróficos.