Los europarlamentarios también enmendaron el texto para garantizar que los datos recabados por las centrales de emergencia o por empresas asociadas no puedan ser transferidos a terceras partes sin el consentimiento explícito de la persona afectada. Los fabricantes automovilísticos también tendrán que asegurarse de que la tecnología «eCall» permita «borrar de manera plena y permanente los datos recabados», de acuerdo con los eurodiputados.
Además, el manual del coche tendrá que incluir «información clara» sobre el procesamiento de los datos del dispositivo y del mismo modo debe estar disponible en Internet. Otra regulación comunitaria que entró en vigor en junio de 2014 impuso que todos los Estados miembros tuvieran que garantizar una infraestructura capaz de tramitar las llamadas del sistema eCall para el 1 de octubre de 2017. Los accidentes de tráfico provocaron en 2013 la muerte de 26.000 personas en la UE, según la Eurocámara.