Cinco diputados del PP no apoyan la mínima reforma de la ley del aborto

r. r. garcía REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Ángel Díaz | EFE

Pedro Sánchez votó por error a favor del consentimiento paterno en menores

15 abr 2015 . Actualizado a las 11:29 h.

Casi cuatro años después y con un ministro dimitido de por medio, el Gobierno tuvo que recurrir ayer al partido que lo sustenta para cumplir con su promesa electoral e iniciar el proceso para cambiar la ley del aborto. En realidad será un cambio mínimo, a la espera de una reforma mayor en función de la respuesta del Tribunal Constitucional al recurso del PP. Solo se suprimirá el artículo que permitía a las menores de edad, y solo en casos excepcionales, interrumpir el embarazo sin el consentimiento paterno, para el que ahora se pide el permiso expreso.

La propuesta se aprobó en el Congreso con 184 votos a favor del PP, Unió Democrática de Catalunya, Foro Asturias y UPN, por 136 votos en contra del resto de los grupos y cuatro abstenciones. Estas últimas correspondieron a los diputados del PP José Eugenio Azpiroz, Lourdes Méndez, Javier Puente y Antonio Gutiérrez Molina, que permanecieron en el hemiciclo, pero no emitieron ningún voto. Sí lo hizo la también popular, Eva Durán, única de su grupo que votó en contra.

La anécdota de la noche la protagonizó el líder socialista, Pedro Sánchez, quien por equivocación pulsó el botón a favor de la reforma de los populares.

La modificación, que mantiene la ley de plazos del PSOE del 2010, a la espera de las futuras enmiendas del posterior trámite parlamentario, no emanó del Gobierno a través del Consejo de Ministros para remitirla luego a las Cortes, sino que fue una propuesta presentada por el grupo popular, algo inhabitual. Este cambio mínimo no contenta a los diputados díscolos del PP, que querían una reforma más profunda, pero tampoco, y justo por lo contrario, a la gran mayoría de los grupos de la cámara por entender que condena a las menores, por motivos «hipócritas y electoralistas, a «un aborto ilegal e inseguro, poniendo en peligro sus vidas por un puñado de votos». Los últimos datos sobre interrupciones voluntarias del embarazo revelan que de las 25.000 españolas que se sometieron a esta operación solo el 3,6 % eran menores y, de ellas, el 87 % informó a sus familias. En números absolutos, solo 113 no lo hicieron, bien porque sufrían maltrato o desarraigo familiar. «Estamos abocando a las mujeres más jóvenes a un aborto clandestino e inseguro», dijo la diputada del PSOE Carmen Montón.

La mínima reforma no significa, sin embargo, que el PP esté de acuerdo con la normativa, por lo que no se descarta que impulse nuevos cambios. La clave está en la resolución del Tribunal Constitucional en respuesta al recurso presentado por los populares contra la ley Aído. La portavoz del PP, Marta González, anunció que su grupo no retirará el recurso, tal y como le pidió el PSOE, ya que el dictamen del Constitucional puede suponer «una base legal sólida sobre la que plantearnos futuras acciones».

Protección en casos de maltrato

La práctica totalidad de la oposición recordó ayer al Gobierno que, pese a lo que quiere hacer creer, la ley actual no permite a las menores abortar sin el permiso paterno. Exige que al menos uno de sus representantes legales esté informado, salvo cuando la menor alegue que esta petición le supone un «conflicto grave» manifestado en el «peligro cierto de violencia intrafamiliar, amenazas, coacciones, malos tratos, o se produzca una situación de desarraigo».