La increíble historia de un bebé que resucitó

La Voz

SOCIEDAD

Una madre relata en las redes sociales cómo su hijo consiguió sobrevivir tras ser declarado clínicamente muerto 

18 mar 2015 . Actualizado a las 17:35 h.

La  historia de Jamie comenzó en el 2010 cuando nació clínicamente muerto junto a su hermana Emily. Su madre, Kate Ogg, entró a quirófano 12 semanas antes de la fecha prevista para el parto y dio a luz a unos gemelos de apenas un kilo de peso. Solo uno de ellos consiguió sobrevivir. Los médicos pusieron al pequeño Jamie en brazos de su madre para que se despidiera. Kate le pidió a su marido, David, que se metiera a la cama junto a ella para darle calor al bebé.

Cogió la cabeza del niño y la puso sobre su pecho mientras le contaba que su nombre era Jamie, que tenía una hermana y que lo iban a echar mucho de menos. El pequeño estuvo dos horas en contacto piel a piel junto a su madre y, de repente, comenzó a emitir unos leves gemidos. Ante el asombro de los padres los médicos advirtieron que el bebé estaba muerto, que no había nada que hacer por lo que lo mejor era no ilusionarse. Pero la ciencia se equivocó. 

El pequeño Jamie empezó a moverse y, antes de abrir los ojos, sujetó con fuerza el dedo de su padre que lo acariciaba. Cinco años después los padres del pequeño superviviente decidieron compartir su historia en las redes sociales. En un vídeo colgado en Youtube Kate relata emocionada todos los detalles de un milagro.

«El doctor me preguntó, ¿has elegido ya un nombre para tu hijo? Sí, respondí, se llama Jamie. Entonces se acercó y me dijo: Jamie no lo consiguió, lo hemos perdido. En ese momento David se derrumbó», confiesa la madre mientras los ojos se le humedecen. 

«Puse a mi bebé junto a nosotros, muy cerca de mi corazón y con la cabeza en mi pecho para que pudiera escuchar mis latidos. Nosotros no podíamos dejar de llorar. Entonces comencé a contarle que tenía una hermana, que se llamaba Emily, que ella estaba bien. Mientras le contaba que teníamos grandes planes para él, para su vida, Jamie empezó a moverse. En ese momento pensé: ¿qué está pasando? Entonces les dije a los médicos que mi hijo se estaba moviendo, que estaba respirando. Ellos me dijeron que estaba muerto, que tenía que despedirme. Pero mi pequeño abrió los ojos y sujetó el dedo de su padre».

El vídeo, que ya supera los ocho millones de reproducciones en Youtube, busca concienciar sobre la importancia del apego en el bienestar de los recién nacidos. «El contacto piel a piel salvó la vida de mi hijo», asegura una soriente Kate. Los gemelos celebran este mes sus primeros cinco años de vida.