¿Y si 2004 BL86 impactase en Galicia?

Borja Tosar ASTRÓNOMO

SOCIEDAD

28 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Un asteroide de 400 metros de diámetro como el 2004 BL86 provocaría al caer en la Tierra un impacto que crearía un cráter de diez kilómetros de diámetro y 600 metros de profundidad. Suficiente para borrar del mapa cualquier ciudad gallega en su trayectoria o cerca del lugar de colisión. La destrucción no se queda solo en el área de una ciudad. En cualquier dirección a cien kilómetros el calor de la bola de fuego originada por el impacto llega a producir quemaduras en la piel de los desafortunados observadores imaginarios e incendiaría la mayoría de los arboles. Transcurridos veintidós segundos llegaría un terremoto de siete grados en la escala de Richter que causaría graves daños en edificios e infraestructuras. Dos minutos después caería una lluvia de guijarros procedentes del material levantado en la colisión. A los cinco minutos llegaría la onda de choque que echaría abajo la mayoría de arboles y llegaría a destruir edificios enteros. En pocos minutos una región del tamaño de Galicia quedaría arrasada y sería pasto de los incendios. Pocas fuerzas de la naturaleza son tan destructivas. La buena noticia es que la mayoría de los cuerpos capaces de tal destrucción están catalogados y, aunque pasen cerca no esperamos ninguna colisión. Estadísticamente ocurre una cada varios miles de años, por lo que podemos respirar tranquilos. Pero los choques en el universo son habituales y la pregunta no es si puede ocurrir, sino cuándo, y ante la temida frase «rumbo de colisión inminente» tocará desviar el asteroide. Entonces, tecnologías similares a las empleadas en la misión Rosetta, capaz de alcanzar un cometa y aterrizar en su superficie, ayudaran a salvar el día. Nunca mejor dicho.