El perro de la contagiada de ébola será sacrificado para evitar riesgos

La Voz REDACCIÓN

SOCIEDAD

08 oct 2014 . Actualizado a las 07:38 h.

Javier Limón, esposo de la auxiliar de enfermería contagiada por ébola, ha cedido temporalmente la custodia de su perro a la asociación Mascoteros Solidarios para buscar una alternativa al sacrificio del animal tras la decisión de la Comunidad de Madrid de ordenar su muerte de manera preventiva.

El abogado del presidente de Mascoteros Solidarios, Víctor Valladares, ha explicado que están buscando otra opción distinta a la muerte de Excalibur, el perro de Javier y María Teresa, y que está a la espera de una notificación judicial para ver que va a pasar con él. En declaraciones a los medios a la puerta de la casa de la mujer en Alcorcón, el abogado de Carlos Rodríguez ha explicado que entienden que se ha tomado una resolución «poco premeditada» y de forma «precipitada» y han pedido que se realice un estudio «un poco más concienzudo».

«Nos hemos enterado a través del portal de la Comunidad de Madrid de la orden de eutanasia del animal. Solicitamos que se agoten todas las posibilidades previas antes de matarle», ha subrayado el abogado de la asociación contra el maltrato animal, que ha afirmado que en caso de que no hubiese otra opción no se opondrían.

Valladares ha señalado que el motivo por el que ha acudido a la puerta de la casa de María Teresa Romero y Javier Limón es para pedir que se le comunique a su cliente, como propietario legítimo del animal, «qué se va a hacer con el perro».

Excalibur se encuentra ahora mismo en la vivienda con comida y agua para dos semanas. Además, ha afirmado que quieren saber «cómo va a ser el método» para sacrificar al animal y «en qué fundamentos» se han basado para tomar esta decisión.

Por su parte, la portavoz del Partido Animalista (PACMA), Laura Duarte ha apuntado que con un animal se debe seguir el mismo protocolo que se seguiría con una persona. «Pedimos que el protocolo que se está aplicando con todo el mundo sea tenido en cuenta también para todas aquellas personas, en este caso Javier y Teresa, que están preocupados por los miembros de su familia como es su perro», ha subrayado.

«No existe ninguna prueba médica ni sanitaria de que el perro esté infectado por ébola», ha destacado la portavoz de PACMA. Por ello, según ha afirmado Duarte, Javier Limón ha exigido «que se aísle al perro en cuarentena, que se le diagnostique el virus y en ese caso, ver qué protocolo se aplica».

Por último, ha recalcado que desde PACMA no van a permitir que un perro sano «vaya a ser sacrificado porque una sociedad como la nuestra no tenga protocolo de emergencia para los animales que viven con nosotros», ha concluido.

Recogida de firmas en Internet

La página web de internet «change.org» ha puesto en marcha una recogida popular de firmas con la que pretenden conseguir 300.000 apoyos para evitar que las autoridades sanitarias sacrifiquen a «Excalibur». Bajo el epígrafe «Poner en cuarentena o aislamiento al perro de la auxiliar infectada por ébola en lugar de sacrificarlo», desde esta web se hace un llamamiento «a los que sean mínimamente sensibles» para que estampen su firma y que la Administración desista de su plan de sacrificar al animal, ante el riesgo de que haya podido ser contagiado por su dueña.

La idea ha partido de Carmen Sánchez Montañés, una sevillana que llama a los amantes de los animales a adherirse a esta iniciativa porque, según señala en la web, «no es justo que además del contagio del ébola por parte de la auxiliar a consecuencia de la falta de medios, pierdan al perro por un simple capricho».

En opinión de esta ciudadana, «es mucho más fácil aislar» al animal «o ponerlo en cuarentena, igual que han hecho con el marido de la víctima. Si está chica falleciera, para su marido el perro, que los ha acompañado años atrás, sería un apoyo emocional importante».

Y añade a continuación: «Para esta pareja no es 'sólo' un perro, es uno más de la familia».

Manifestación para que no maten Excalibur

Un centenar de personas se ha concentrado en Alcorcón frente al bloque de viviendasante la decisión de las autoridades sanitarias madrileñas de sacrificar a Excalibur. Tras el llamamiento hecho en las redes sociales por asociaciones de defensa de los animales para salvar al perro, a la protesta han acudido militantes y simpatizantes del Partido Animalista, algunos de ellos ataviados con petos de esta formación que luego se han quitado al comentar entre ellos que la protesta no estaba autorizada. «Javi y Teresa, Excalibur no está solo», han coreado los concentrados en referencia a los nombres de la auxiliar de enfermería, su marido y la mascota de ambos. «Sí al perro y no a la Mato», «Vecino, el próximo es tu perro» y «Sin prueba de contagio, sacrificio ilegal» han sido otros de los lemas que más se han escuchado.

Entre los concentrados se encontraba Carlos Rodríguez, quien supuestamente tiene ya la custodia del perro y un abogado. Ambos han explicado a Efe que se habían acudido para enterarse qué va a pasar con el perro y han aclarado que no pretendían hacer «una acción concreta».

Según los vecinos, el perro seguía a primera hora de la noche en el piso de la pareja, en la sexta planta de un edificio de siete alturas del barrio de Los Castillos, en el municipio madrileño de Alcorcón, con comida y agua para varios días. Un grupo de agentes de la Policía Local y de la Policía de Fronteras del Cuerpo Nacional de Policía formaba un cordón de seguridad delante del edifico. El portero de la finca, de la que es presidente de la comunidad el marido de la auxiliar de enfermería, colocó esta tarde un cartel en el que se puede leer: «Comunicado a la prensa. Por petición de los vecinos de la comunidad de propietarios Residencial Jardín III, se ruega no entorpezcan el desarrollo normal del vecindario, respetando las zonas comunes y las zonas de acceso a la comunidad, tanto peatonales como de vehículos».

Los concentrados no han llegado a interrumpir el tráfico de la avenida donde vive el matrimonio, formada por cuatro carriles (dos en cada sentido) y una mediana.

La Comunidad de Madrid ordena el sacrificio

La Comunidad de Madrid ha ordenado sacrificar al perro de Teresa Romero Ramos, la auxiliar de enfermería contagiada por el virus del ébola al entender que «supone un posible riesgo de transmisión de la enfermedad al hombre», ya que «vivía en estrecho y permanente contacto» con la paciente, según informa la agencia EFE.

En una nota de la Consejería de Sanidad remitida hoy a los medios se explica que, según la información científica disponible, «existen datos que confirman el hallazgo de perros con anticuerpos positivos del virus del ébola», por lo que estos animales «pueden sufrir un proceso de viremia aunque se muestren asintomáticos». «En consecuencia, no existe garantía de que los animales infectados no eliminen el virus a través de sus fluidos orgánicos, con el riesgo potencial de contagio», ha indicado.

El Gobierno regional ha comentado que la decisión de sacrificar al perro se tomó tras consultar el caso con las autoridades de sanidad animal del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y con el Director del Laboratorio de referencia de la Organización Mundial de Sanidad Animal. «La única manera de eliminar el riesgo existente de transmisión de la enfermedad por la citada vía, es proceder a la eutanasia del animal que ha estado en contacto con el virus», ha añadido.

A pesar de la negativa del dueño para facilitar la muerte del perro, la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid ha emitido una resolución, ratificada hoy por el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Madrid, para sacrificarlo y proceder al traslado y posterior incineración del cadáver del animal. El perro, según ha precisado el Ejecutivo madrileño, será sacrificado «mediante las medidas adecuadas para evitar su sufrimiento, utilizando las medidas de bioseguridad y biocontención adecuadas a este riesgo».

Javier Limón contactó con una protectora de animales para denunciarlo

De nada parece haber servido que Javier Limón, el marido de la auxiliar de enfermería gallega Teresa Romero Ramos, se pusiese en contacto con una protectora de animales horas antes explicando que se negaba a sacrificar el perro de la pareja, como le pedían desde la consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid.

Así lo denunciaba el hombre, que se encuentra aislado por precaución en una habitación del Hospital Carlos III de Madrid, donde también está ingresada su mujer. Javier Limón se ha puesto en contacto con la Asociación Protectora Villa Pepa, que había difundido un mensaje en su nombre a través de Facebook.

En él, Javier Limón denunciaba que «que un tal Zarco, creo que es Jefe de Sanidad de la Comunidad de Madrid, me ha dicho que tienen que sacrificar a mi perro así, sin más», escribe. «Me pide mi consentimiento a lo cual me he negado rotundamente. Dice que entonces pedirán una orden judicial para entrar por la fuerza en mi casa y sacrificarle», afirmaba.

«Me parece injusto que por un error de ellos quieran solucionar esto por la vía rápida. Un perro no tiene porque contagiar nada a una persona y al revés tampoco. Si tanto les preocupa este problema creo que se pueden buscar otro tipo de soluciones alternativas, como por ejemplo poner al perro en cuarentena y observacion como se ha hecho conmigo. O acaso hay que sacrificarme a mí por si acaso. Pero claro, un perro es más fácil, no importa tanto», concluía.

Esta denuncia a través de las redes sociales generó un amplio debate y miles de apoyos a la pareja para defender la vida del perro, aunque finalmente parecen no haber servido de mucho. En Twitter se han convertido en trending topic hasgtag como Manuel Molina (Director General de Inspección Sanitaria de la Comunidad de Madrid) o #SalvemosaExcalibur, entre otros. En la plataforma de Change.org se ha activado una recogida de firmas para intentar salvar.

No está probado que un perro pueda sufrir ébola

Los distintos tipos de virus del ébola, causantes de fiebres hemorrágicas en humanos, no infectan de forma natural al perro y sí a los primates, cerdos y murciélagos.

La catedrática de Enfermedades Infecciosas de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid, Isabel Simarro, ha indicado a EFE que, hasta el momento, no se ha demostrado científicamente, según lo publicado, que el perro se pueda infectar de forma natural con el ébola.

La catedrática ha apuntado que en el laboratorio sí se ha ensayado la replicación del virus en ratón, hámster y cobaya, pero por adaptación artificial y no natural.