Rusia deja adoptar de nuevo, pero excluye a homosexuales y solteros

Madrid / Europa Press

SOCIEDAD

Un grupo de niños rusos durante la comida en un centro de tránsito para menores en San Petersburgo.
Un grupo de niños rusos durante la comida en un centro de tránsito para menores en San Petersburgo.

España y Moscú desbloquearán el miércoles la situación con un convenio

05 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Los Gobiernos de España y Rusia firmarán el próximo miércoles el convenio que desbloqueará las adopciones de niños rusos por matrimonios heterosexuales, pero que cerrará definitivamente la puerta a que los menores sean acogidos por parejas del mismo sexo o personas solteras.

El Consejo de Ministros autorizó ayer la firma de la última versión del acuerdo, que pondrá fin a la angustia de algunas de las casi 600 familias españolas que vieron cómo se paralizaban sus procesos por la decisión que Moscú tomó hace un año de frenar los trámites que vinieran de países que reconocen el matrimonio entre personas del mismo sexo, caso de España. El Gobierno español había autorizado la firma del convenio en diciembre del 2013, pero Rusia introdujo cambios que obligaron al Ejecutivo de Mariano Rajoy a volver a aprobar el texto definitivo. El convenio pondrá negro sobre blanco las condiciones que tendrán que cumplir los solicitantes para adoptar un menor de nacionalidad rusa y prohibirá que los niños sean acogidos por parejas homosexuales o solteros.

Además, permitirá que las autoridades rusas puedan solicitar informes sobre la situación de los menores rusos adoptados por familias españolas, «con independencia de la fecha de constitución de la adopción», informó el Gobierno. «No obstante, se establece que este compromiso se articula en tanto que lo permita la legislación del Estado receptor (España)», precisa.

La otra modificación que introdujo Rusia en el acuerdo establece que las autoridades españolas garantizarán que el menor adoptado sea inscrito en la Matrícula Consular del Consulado de la Federación Rusa que corresponda por su domicilio.

En consecuencia, las autoridades rusas podrían solicitar a las españolas que reubiquen al niño en otro entorno en caso de no estar conformes con la información recibida, cuestión que se analizaría caso por caso y ajustándose a la legislación española, para lo que se ha introducido una salvedad en el convenio.

Desde hace una década, Rusia se había convertido en el principal país, junto con China, al que acudían las familias españolas para adoptar. Desde 1999 unos 12.000 menores rusos fueron adoptados por familias españolas. Para los niños rusos, también España es uno de sus principales destinos.

En el 2009, ante informaciones procedentes de países como Estados Unidos que apuntaban a maltrato de menores adoptados en Rusia e incluso tráfico de niños, el Kremlin comenzó a revisar todos sus acuerdos de adopción con el extranjero a fin de garantizar un seguimiento de la situación de los adoptados.

Poco después, llegaron nuevas restricciones. Como Moscú no permite adoptar a homosexuales muchos de ellos iniciaban los trámites como familia monoparental para burlar la prohibición. Para poner freno a esta práctica, prohibió la adopción internacional de niños rusos por parejas del mismo sexo y paralizó todos los procesos iniciados por ciudadanos de países donde se reconoce el matrimonio gay, como España.

La medida afectó a alrededor de 600 familias españolas, independientemente de que fueran matrimonios heterosexuales o familias monoparentales las que hubieran iniciado el procedimiento de adopción. De esas 600 familias, a un centenar ya se les había asignado un menor.

Con respecto a la restricción que el nuevo convenio supone para las parejas del mismo sexo o personas solteras, el Ministerio de Exteriores indicó que «esa cuestión corresponde a la legalidad interna rusa, que no permite este tipo de adopciones».