Pide la supresión de información que pueda perjudicar a una persona
15 may 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Lleva colgado del teléfono dos días, desde que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha dado la razón a Mario Costeja en un contencioso que lo enfrentó al todopoderoso Google por no eliminar de Internet informaciones antiguas que le perjudicaban profesional y personalmente. El abogado y perito calígrafo judicial coruñés se define a sí mismo como un «defensor de la libertad de expresión y de las hemerotecas», pero siempre que estas no difundan datos que pueda damnificar el presente y el futuro de cualquier persona.
-¿Qué originó su lucha contra Google?
-Fue hace muchos años, cuando en un periódico de tirada nacional salía un anuncio de una subasta en la que se me nombraba como copropietario del bien subastado. Esa deuda ni la contraje ni la tenía, y el tema se solucionó. Pero cuando se digitalizó esa información del periódico, empezó a salir en Google cada vez que alguien ponía mi nombre en el buscador, algo que no me venía muy bien para mi vida profesional, ya que en aquel entonces era consultor de empresas.
-¿Qué le parece la sentencia que le acaba de dar la razón?
-La sentencia me parece correcta, aunque tengo que matizar que yo nunca he defendido el derecho al olvido, yo lo que defiendo y solicito es la supresión de Internet de información que pueda ir contra el honor, la dignidad, la reputación o la injerencia en la vida privada de una persona, información que no tenga relevancia y que puede perjudicar familiar y profesionalmente a una persona.
-Pero en Internet es muy complicado controlar eso.
-Precisamente por eso. Una persona que se oculta en el anonimato de Internet puede decir verdaderas barbaridades de otra persona, y eso queda ahí para siempre. Eso no es libertad de expresión, yo siempre he defendido la libertad de expresión y defiendo las hemerotecas a capa y espada, pero siempre que se ofrezca información real y se supriman los datos no relevantes que puedan perjudicar a una persona.
-Algo muy distinto al derecho al olvido.
-Sí. Yo no defiendo el derecho al olvido en casos como el de los políticos que meten la mano en la caja y se confirma que lo han hecho. En estos casos, considero que no se debe borrar la información (si no que no lo hubieran hecho) y debe quedar constancia de ello.
-¿Han retirado de Google la información que inició todo este proceso judicial?
-Aún no. Creo que se tienen que cumplir unos plazos para que puedan eliminarla.
-A pesar del enfrentamiento con Google, el portal facilita su contacto personal al poner su nombre. ¿No es un poco contradictorio?
-Desde que puse la denuncia estoy en todos los medios, y al principio yo no quería entrar a hablar, pero vi que todo el mundo hablaba de mí, así que tomé la decisión de que sería yo el que hablaría de mí.