Eclipse solar: Y el «anillo de fuego» solo se vio en la Antártida

Europa Press

SOCIEDAD

Un hombre explica a los visitantes del Observatorio de Perth (Australia) durante el eclipse solar anular
Un hombre explica a los visitantes del Observatorio de Perth (Australia) durante el eclipse solar anular DAVID GRAY

Los australianos solo pudieron observar cómo la luna ocultaba el 65 % del sol

29 abr 2014 . Actualizado a las 19:24 h.

El primer eclipse solar del 2014 tuvo lugar este martes y, aunque las nubes que cubrían Australia pusieron en riesgo su visibilidad, finalmente los australianos pudieron observar cómo la luna tapaba hasta el 65 % de la estrella. Sin embargo, la fase en la que podía verse el satélite rodeado del anillo de fuego del Sol sólo se vio en la deshabitada Antártida, es decir, solo los pinguinos y otros animales polares pudieron presenciar plenamente este fenómeno.

Mientras que los eclipses lunares ocurren sólo cuando hay luna llena, los eclipses de sol suceden durante la luna nueva. En el caso del que tuvo lugar este martes, el eclipse fue anular, es decir, cuando la Luna esté cerca de su mayor distancia de la Tierra, por lo que es demasiado pequeña para cubrir el sol por completo.

El efecto de los eclipses solares anuales tiene como resultado un anillo de fuego alrededor de la silueta de la luna. Esto ocurre debido a que el diámetro del satélite es menor que el solar por lo que no lo podrá cubrir por completo, de forma que en la fase máxima permanece un anillo del disco del astro.

Este eclipse de sol, el número 21 de los 75 eclipses del ciclo Saros 148, tuvo como particularidad no ser central ya que el cono de sombra de la luna roza la superficie de la Tierra, pero el eje no pasa por ella. Este fenómeno solo se da en los extremos terrestres, es decir, la Antártida y el Ártico, y son complicados de observar por la zona en la que se producen y por las incertidumbres al darse tan cerca del horizonte.

Los eclipses solares parciales tienen el mayor potencial de daño a los ojos al intentar contemplarlo porque en ningún momento el sol está completamente cubierto por la Luna. La forma más segura de ver un eclipse solar es proyectar su imagen o utilizar un cristal con filtro adecuado.

Los eclipses solares se producen, en promedio, alrededor de una vez cada 18 meses. El evento del martes se produce casi un año después de un impresionante anillo de eclipse de fuego sobre Australia que cautivó a los observadores del cielo el 10 de mayo del 2013.

20 de marzo del 2015, eclipse solar total en España

En España habrá que esperar casi un año, al 20 de marzo del 2015, para poder ver un eclipse solar. En esta ocasión, será de tipo total y, si las condiciones meteorológicas lo permiten, visible en todo el territorio. La oscuridad llegará a la Península y Canarias desde las 8 hasta las 11 horas. Tras su paso por España, la sombra de la luna se alejará de la superficie de la Tierra por la zona polar. La particularidad en esta ocasión será que se producirá exactamente en el día del equinoccio de primavera.

La última ocasión que España pudo presenciar un eclipse de sol fue el 29 de marzo del 2006. Aunque era total, desde la Península se observó como parcial teniendo los gallegos la menor visibilidad.

Intenso mes de mayo

Entre eclipses, planetas brillantes y lluvias de meteoros, este mes de abril ha comenzado lo que los astrónomos denominan como «temporada de primavera». Tras el eclipse total lunar del pasado 15 de abril que marcó la primera luna roja de las «cuatro lunas de sangre» y que abrió todo tipo de teorías apocalípticas y sobre el fin del mundo, sumado a la reciente lluvia de estrellas fugaces de las Líridas abrieron una época de «intensa actividad» astronómica quese cerró este martes con el eclipse solar.

Un broche de oro para el mes de abril, pero no para esta estación ya que mayo también se presenta como un intenso mes astrónomico con la espectacular lluvia de estrellas nunca vista hasta ahora que iluminará el cielo el próximo 24 de mayo así como la de Eta Acuáridas y el acercamiento de Saturno.