A los obispos no les gusta «la letra ni la música» de la ley del aborto

a. p. madrid / colpisa

SOCIEDAD

Gil Tamayo quiere sustraer el debate de la reforma legal del ámbito religioso

04 ene 2014 . Actualizado a las 09:48 h.

A los obispos no les gusta «ni la música ni la letra» de la nueva ley de reforma del aborto. El secretario general de la Conferencia Episcopal, José María Gil Tamayo, negó ayer que la jerarquía eclesiástica haya influido en los autores del texto, pues la Iglesia defiende un «principio básico» y universal: «No se puede legitimar la muerte de un inocente», aseguró a Onda Cero. Para el portavoz de los prelados es preciso sustraer el debate del aborto del ámbito religioso, ya que el problema debe ser juzgado en virtud de una «opción ética fundamental». «La defensa de la vida no es una cuestión de derechas y la opción del aborto una cuestión de izquierdas», dijo el sacerdote.

Pero las de Gil Tamayo no fueron las únicas declaraciones de ayer sobre la polémica reforma política. Por un lado, sigue la ofensiva de los socialistas por mantener la normativa en los medios, con declaraciones como las de Elena Valenciano, para quien «el Gobierno va a conseguir añadir sufrimiento al sufrimiento» aunque «es muy difícil convencer a las mujeres que a partir de ahora no van a decidir sobre su maternidad».

Frente a este afán de establecer un debate público, las voces críticas con la ley dentro del PP parecen haberse calmado. Ayer solo se habló a favor de la normativa que presentó hace un par de semanas Alberto Ruiz Gallardón. Lo hizo el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, quien recalcó que «el Gobierno ha hecho lo que tenía que hacer», un texto que, «como miembro del Gobierno, hago mío». Otro alto dirigente popular que ha mostrado su apoyo a la ley es el presidente valenciano, Alberto Fabra; este dijo que está a favor de basar la normativa «en los supuestos, como ha hecho el Gobierno, y no en los plazos», al tiempo que ha valorado que la nueva norma incorpora aspectos que «dan mucha más seguridad a los profesionales sanitarios». Y la vicesecretaria de Territorio del PP de Andalucía, Alicia Martínez, enmendó lo dicho por su compañera Ana María Corredera, que pedía libertad de conciencia para votar la ley; según Martínez, «el voto debe ser siempre en conciencia, sea o no secreto».