Por su parte, el alcalde de Toronto compareció ante los medios de comunicación poco después del anuncio de Blair y dijo que no pensaba en abandonar su cargo. Ford, que no contestó a las preguntas de los medios de comunicación, se limitó a señalar que «todo el mundo ha visto las acusaciones contra mi. Me gustaría defenderme, pero desgraciadamente no puedo porque está ante los juzgados». «No tengo ninguna razón para dimitir. Voy a hacer lo que quiere la gente que me ha elegido», añadió.
La policía también detuvo hoy Alessandro Lisi, un amigo de Ford y que es conocido como el conductor de Ford, y le acusó de extorsión. Lisi, que tiene antecedentes penales por violencia contra mujeres, ha sido identificado por los medios de comunicación de Toronto como un traficante de drogas que suministra a Ford narcóticos. La detención de Lisi estaría relacionada con los esfuerzos de Ford por recuperar el vídeo en el que aparece fumando «crack» y amenazar a varias personas que habrían estado en posesión de las imágenes.