El Cesga permitirá a las empresas probar virtualmente sus productos

Raúl Romar García
R. Romar REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

<span lang= es-es >De la energía eólica al petróleo</span>. La supercomputación permite simular desde el comportamiento de aerogeneradores a piezas de la industria petroquímica
De la energía eólica al petróleo. La supercomputación permite simular desde el comportamiento de aerogeneradores a piezas de la industria petroquímica

Ofrece infraestructura de supercomputación dentro de un proyecto europeo

12 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

¿Cómo se comporta el ala de un avión en pleno vuelo?, ¿cuál es el mejor diseño para reducir el ruido provocado por la pala de un aerogenerador?, ¿qué estructura es la más adecuada para que un barco se deslice mejor en el agua?, ¿cuál es el mejor diseño para sellar las piezas en una plataforma de gas o de petróleo cuando están sometidas a altísima presión o temperatura? El cálculo matemático, con un hardware adaptado a cada caso, es lo único que ofrece respuestas a estas preguntas. Se requiere también una enorme infraestructura de computación para diseñar las piezas y conocer su comportamiento mediante una simulación. Son productos virtuales, esenciales antes de desarrollar el prototipo físico. Solo que esta tecnología, que ahorra costes y ofrece una gran ventaja competitiva, únicamente está al alcance de las grandes empresas. Hasta ahora, porque un proyecto europeo estratégico, denominado Fortísimo, creará una plataforma de computación de altas prestaciones a través de infraestructura en la nube que se ofrecerá a las pymes, al igual que soluciones de hardware, asesoramiento tecnológico y aplicaciones informáticas, para que puedan encontrar una solución a sus productos mediante la simulación avanzada.

El proyecto, que involucra a 44 socios europeos y que tiene un presupuesto de 21,7 millones de euros, tendrá al Centro de Supercomputación de Galicia (Cesga) como referente para España y Portugal en las infraestructuras de súpercomputación y de gestión de datos, mientras que el centro tecnológico Aimen, con base en Porriño, se encargará de la preparación de los cálculos para cada caso.

Mejorar la producción

«La plataforma ofrecerá a las pymes la capacidad para simular sus productos, lo que permitirá optimizar su calidad y mejorar su producción», explica Andrés Gómez Tato, que asegura que «cualquier empresa de Galicia del sector manufacturero, especialmente las del sector del metal, mecánica o naval, es susceptible de beneficiarse».

La iniciativa ya ha arrancado con veinte empresas, que han sido seleccionadas de un proyecto anterior, entre ellas la gallega Texas Controls, aunque en noviembre se abrirá la convocatoria para que puedan entrar otras veinte y, más adelante, otras diez. Así hasta completar cincuenta casos concretos en los que la simulación virtual pueda ofrecer una solución que pueda beneficiar también a otras pymes.

«Nuestro ensayo es un caso típico aplicado al sector de la petroquímica», explica Germán Rodríguez, representante de Texas Controls, situada en Bergondo. La sociedad, que ofrece servicios a compañías como Repsol, Cepsa, Petrogal, Abengoa, Gamesa o Vestas, se dedica fundamentalmente al sellado de infraestructuras industriales a alta presión y elevadas temperaturas en explotaciones de gas y petróleo. «Tienes que evitar que el líquido y el gas encerrado a alta presión y temperatura salga, porque cualquier fuga supone una catástrofe», subraya Rodríguez. Si este es el problema, lo que permite el desarrollo de piezas probadas antes mediante la realidad virtual es «probar distintas soluciones técnicas para ver luego cuál es la que mejor se comporta ante el problema que tienes planteado. Es un filtro técnico muy bueno».