Diego Martínez Santos aún le quedan dos años y medio de los tres de contrato en el Nikhef de Ámsterdam, aunque espera regresar antes a Galicia o España. Volverá a intentarlo de nuevo y evita entrar en detalles sobre el rechazo a su solicitud de un contrato Ramón y Cajal. No se siente cómodo abordando el tema.
-¿Le sorprendió que lo rechazaran con su currículo?
-Me enteré el mismo día del resultado y del fallo europeo. Me sorprendió un poco, pero este tipo de cosas siempre tienen algo de aleatorio. Estas cosas dependen de muchos factores.
-¿Volverá a presentarse?
-De aquí a un año veremos, pero igual sí me presento.
-¿Se ve en Holanda?
-No, no me veo viviendo toda mi vida ni en Holanda ni en Ginebra. Me gustaría volver a Santiago y, si no, a otro lugar de España, o incluso a Italia, un país un poco menos frío.
-¿Se esperaba el premio?
-No. Sabía que estaba nominado, pero no le di mayor importancia. Pero está muy bien, porque es un premio muy importante y este tipo de cosas siempre te ayudan en tu carrera y te dan prestigio.