La Asamblea General de la ONU aprueba el tratado para regular el comercio de armas

La Voz AGENCIAS

SOCIEDAD

El texto, que se debatía desde hace siete años, se aprobó con los votos a favor de 154 países

02 abr 2013 . Actualizado a las 23:15 h.

Casi 20 años después de que la sociedad civil reclamara regular el comercio de armas en el mundo, la comunidad internacional dio hoy un gran paso en la historia de los derechos humanos con la aprobación del primer Tratado sobre el Comercio de Armas.

La Asamblea General de la ONU adoptó por una abrumadora mayoría de 154 votos a favor, tres en contra y 23 abstenciones un histórico tratado que cierra un largo proceso negociador diplomático que descarriló por primera vez en el 2012 y la semana pasada tampoco se pudo sacar adelante por consenso. Ahora cada país deberá ratificar el acuerdo.

En contra votaron Irán, Corea del Norte y Siria, países que las últimas semanas hicieron fracasar las conversaciones para lograr el Tratado. Ahora cada país deberá ratificar el acuerdo«No estamos en contra del tratado, pero no podemos apoyarlo tal como está porque no incluye los puntos que habíamos planteado para que fuera equilibrado», dijo el embajador sirio, Bashar Jaafari, al anunciar el voto en contra de su país. Según el representante sirio, el texto no prohíbe la transferencia de armas a grupos armados no estatales e «ignora» la propuesta de algunos países de mencionar los derechos inalienables de los pueblos cuyo territorio está siendo ocupado por una potencia extranjera.

«La pregunta que debemos hacernos es por qué hemos tardado tanto tiempo», afirmó el embajador costarricense ante la ONU, Eduardo Ulibarri, antes de que el presidente de la Asamblea General, el serbio Vuk Jeremic, invitara a los países explicar su voto.

La resolución, en la que se abstuvieron Rusia y la India, solicita al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, que abra el nuevo tratado a la firma de los Estados a partir del 3 de junio. Asimismo, el texto exhorta a todos los Estados a que consideren la firma del tratado y que posteriormente, con arreglo a sus respectivos procedimientos constitucionales, lo ratifiquen «a la mayor brevedad posible».

«Por primera vez tenemos un tratado legal vinculante que regula el negocio más letal del mundo, el comercio de armas.Ahora ya no podrán operar y armarse con impunidad. El mundo estará observándoles y les pedirá responsabilidades», afirmó Anna MacDonald desde Oxfam. Annistía Internacional, por su parte, aseguró que se trata de un «momento histórico». Aunque histórica, la jornada quedó algo descafeinada por la abstención de algunos pesos pesados como Rusia, India o China, que en todo caso dejaron la puerta abierta a sumarse al tratado en el futuro, una vez que el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, pida a los países que lo firmen a partir del 3 de junio.

Abstenciones

El texto fue finalmente apoyado por más de un centenar de naciones, incluido Estados Unidos., el mayor exportador de armas del mundo, y por los veintisiete países de la Unión Europea, entre otros. Los representantes de Bolivia, Cuba, Ecuador, Nicaragua y Venezuela finalmente decidieron abstenerse al considerar que el tratado «privilegia» a los países exportadores y es susceptible de ser «manipulado políticamente». Esos cinco países consideraron que el tratado «no es equilibrado», no incluye una mención expresa a la prohibición de transferir armas a grupos armados no estatales e incluye algunas «deficiencias» que les impiden votar a favor de su aprobación. En el caso de Pakistán, uno de los países cuya posición era ambigua antes de la votación, anunció finalmente su decisión de apoyar el nuevo tratado, aunque antes defendió la importancia de respetar el «consenso» en la ONU.

El embajador australiano Peter Woolcott, que estuvo al frente de la negociación en la recta final, admitió que si se hubiese adoptado por consenso «habría tenido un poco más de legitimidad», pero dijo que la comunidad internacional dispone ahora de un tratado «potente» que incluye «obligaciones concretas» para los países.

Un mercado que mueve más de 45.000 millones de euros anuales

Este tratado de la ONU es el primero que reglamenta la venta de armas convencionales, un mercado de más de45.000 millones de euros al año, y el primer texto sobre desarme desde la adopción de la prohibición de ensayos nucleares en 1996.

El principio del tratado consiste en que cada país debe evaluar, antes de toda transacción, si las armas vendidas pueden ser utilizadas para eludir un embargo internacional, cometer un genocidio y otras «violaciones graves» a los derechos humanos, o caer en manos de terroristas o criminales. En todos estos casos, el país exportador estará obligado a rechazar la transacción. El tratado incluye todas las transferencias internacionales (importación, exportación, tránsito) y la intermediación.

Las armas incluidas van desde las pistolas hasta aviones y barcos de guerra, pasando por los misiles. La lista no comprende a los drones, los transportes blindados de tropas y los equipos destinados a las fuerzas del orden.