«Si hago lo que los fans de 'Ted' o 'Family Guy' esperan, la gente huirá del teatro», aseguró al admitir que debe encontrar un equilibrio. Para ello, se fija en Crystal, pero también en Ricky Gervais, que fustigó a las estrellas en tres ediciones de los Golden Globe.
«Veremos unos Oscar muy entretenidos», prometió Lee. Grandes logros conllevan grandes riesgos y es posible que el lunes se hable tanto de «Argo», de «Lincoln» y de Daniel Day-Lewis como de MacFarlane.
«No siento presión. Sea el mejor espectáculo del mundo o sea el peor me van a despellejar», aseguró el presentador, que si no ve nada que perder puede convertirlo en más peligroso. Las estrellas tiemblan. El cáustico McFarlane está en escena. Absténganse oídos sensibles o amantes de la corrección política. El presentador no va a ser un anfitrión cómodo.