Recurre al margen de contenidos que, por ley, configuran en exclusiva las autonomías para recuperar los conceptos suprimidos por Wert
21 ene 2013 . Actualizado a las 21:37 h.Los alumnos andaluces seguirán estudiando este curso los contenidos más polémicos de la asignatura Educación para la Ciudadanía (EpC). La Junta ha recurrido a un resquicio legal para incorporar todos los conceptos suprimidos por el Ministerio de Educación el pasado mes de agosto por ser «susceptibles de caer en el adoctrinamiento ideológico», y se ampara en la posibilidad de fijar en exclusiva el 35% de los contenidos en el caso de las regiones con competencias transferidas (una posibilidad que suprimirá la nueva reforma educativa, donde el Ejecutivo fijará el 100% del contenido de las asignaturas troncales). Mientras tanto, y mediante material didáctico complementario, se recuperarán nociones como las familias monoparentales, la homosexualidad o el aborto.
La postura de la Junta de Andalucía había sido anunciada ya con anterioridad nada más conocerse la supresión de determinados contenidos, convirtiendo la asignatura en un puntal más de la batalla de las dos administraciones en materia educativa. Pero no ha sido hasta ahora cuando se han modificado las normas que regulan los contenidos de EpC en Primaria y Secundaria, que se publicaron ayer mismo en el Boletín Oficial de la Junta (BOJA).
En la modificación de las ordenes para el desarrollo curricular educativo de ambas enseñanzas en los centros andaluces, la Junta subraya que tiene competencias para fijar un tercio de los contenidos de todas las asignaturas, opción que aprovecha para «volver a acercar EpC a los valores constituciones» y evitar que, como aseguró la consejera Mar Moreno en su día, la asignatura quede «descafeinada». Así, defiende que los elementos excluidos por el Gobierno central, tal y como ha avalado el Tribunal Supremo en varias sentencias, «son relevantes y se ajustan a los principios y valores recogidos en la Constitución española». E incluso recuerda que el fomento de una ciudadanía responsable es una preocupación compartida por Naciones Unidas, la UE o el Consejo de Europa.
Hasta ahora, apenas se había recurrido a ese margen legal salvo para incluir referencias al Estatuto autonómico andaluz o al funcionamiento de las instituciones de la comunidad. Ahora se apela a él para incluir contenidos como los afectos y emociones; las desigualdades hombre-mujer; la diversidad social, cultural o religiosa, y el «respeto crítico por las costumbres y modos de vidas distintos al propio». También se recuperan conceptos como los prejuicios sociales racistas, xenófobos, antisemitas, sexistas y homófobos; la feminización de la pobreza y la falta de acceso a la educación como fuente de la misma, así como «lucha contra la pobreza y la ayuda al desarrollo» y el respeto a las diferencias y el rechazo de la violencia.
Para incluir los nuevos conceptos, los alumnos no tendrán que cambiar los manuales con los que iniciaron el curso el pasado mes de septiembre.
La apuesta de la Junta pasa por mantener los contenidos fijados por el Gobierno central -dado que no tiene potestad para eliminarlos-, que serán complementados a través de material didáctico anexo con los nuevos temas.