La sal de productos cárnicos se reducirá un 10 % y la grasa un 5

Raúl Romar García
R. Romar REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Galicia es la comunidad que presenta un mayor consumo de sodio

20 jul 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Usted probablemente ni lo haya notado, pero sepa que desde hace unos tres años el pan que come tiene un 20 % menos de sal. Si su sentido del gusto no lo ha percibido, muy probablemente sí lo haya hecho su salud, ya que el contenido de sodio en los productos alimentarios constituye uno de los principales factores de riesgo cardiovascular. La misma estrategia que se ha seguido con el pan se practicará ahora con los productos de carnicería y charcutería. De aquí a los dos próximos años la cantidad de sal de las salchichas y hamburguesas de cerdo, de la hamburguesa de ternera, del embutido de sangre, de la butifarra blanca y de la chistorra irán reduciendo progresivamente la cantidad de sal hasta lograr una disminución del 10 % con respecto a los artículos que ahora están en el mercado.

Convenio

No será el único recorte, en este caso saludable, que se les aplicará, ya que también se rebajará en un 5 % su contenido graso, algo esencial para prevenir la actual epidemia de obesidad y controlar los elevados niveles de diabetes de tipo II que cada vez en mayor medida se detectan entre la población.

La medida, que se ha materializado en un convenio que ayer suscribieron los responsables de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria con los representantes de la industria del sector, resultará especialmente beneficiosa para Galicia, la comunidad con la población más adicta a la sal de toda España. Galicia esta renunciando a marchas forzadas a la saludable dieta atlántica en buena parte por el abuso de este condimento alimentario, lo que se traduce en que la hipertensión se haya convertido en el principal motivo de hospitalización, según ha apuntado el cardiólogo José Ramón González-Juanatey.

La disminución de sal y grasa en los productos cárnicos tampoco tendrá incidencia ni en su sabor, ni en su seguridad, ni en su calidad, según el compromiso alcanzado ayer con el ministerio por la Confederación Española de Detallistas de la Carne y la Asociación de Fabricantes y Comercializadores de Aditivos y Complementos Alimentarios. «Este es un instrumento para aportar calidad, seguridad y salud a los alimentos que ofrecemos a los ciudadanos», explicó en la presentación Pilar Farjas, secretaria general del Ministerio de Sanidad.

Esta iniciativa tiene un precedente en el convenio firmado entre el ministerio y la industria del pan, por el que entre los años 2005 y 2009 se logró rebajar en un 20 % el contenido de sal. Es más, incluso se superó el objetivo marcado y se ha pasado de 22 gramos por kilo a 16,3, con lo que el pan español ya es el que tiene menos cantidad de sodio de Europa.