La vicesecretaria general del PSOE aseguró que «las mujeres no quieren salvadores ni padres espirituales», sino «ser libres para decidir»
09 mar 2012 . Actualizado a las 07:00 h.El Gobierno en pleno y numerosos dirigentes del PP salieron ayer en defensa de Alberto Ruiz-Gallardón, después de las duras críticas y el revuelo que causaron en las redes sociales sus reflexiones acerca del aborto, el miércoles en el Congreso.
El ministro de Justicia aludió entonces a «una violencia de género estructural contra la mujer» desde que se queda en estado, una presión del entorno en los embarazos no deseados que estaría detrás de numerosas interrupciones.
En el acto institucional conmemorativo del Día de la Mujer organizado por el Gobierno, la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, comprometió, tal y como recoge Efe, el respaldo del Ejecutivo a las mujeres que quieren ser madres para que no dejen de hacerlo por cualquier tipo de «presión», con lo que refrendó el discurso del titular de Justicia. El presidente gallego, Alberto Núñez Feijoo, manifestó por su parte que ningún ministro puede ser criticado por decir «que o aborto non é a única saída», porque «non ofende a ninguén, tampouco ás mulleres, que teñen todo o dereito a ser nais».
Con todo, ayer arreciaron las críticas contra las palabras de Gallardón, especialmente desde el PSOE. Su vicesecretaria general, Elena Valenciano, advirtió al Gobierno que las mujeres no quieren «salvadores» ni «padres espirituales» que les digan lo que es bueno o malo para ellas, sino que quieren «ser libres» para decidir si desean abortar u optar por la maternidad.
La portavoz parlamentaria de los socialistas, Soraya Rodríguez, aseguró -siempre según Efe- que las palabras de Gallardón lo «descalifican» a él y a quienes le aplaudieron, y se preguntó además cómo puede el Gobierno hablar de derecho a la maternidad cuando la reforma laboral que ha promovido limita el derecho a la lactancia y obstaculiza la conciliación.
En Galicia, el portavoz nacional del BNG, Guillerme Vázquez, sostuvo que «a auténtica violencia de xénero estrutural» es la que «exerce a dereita dende o poder coas súas políticas regresivas».
«Las mujeres no quieren salvadores ni padres espirituales [...], quieren ser libres para decidir»
Elena Valenciano