Lydia Bosch deja la casa familiar

redacción / la voz

SOCIEDAD

Mañana, la revista por solo 0,30 euros con La Voz

27 ene 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

La complicada vida de Lydia Bosch tras su sonado divorcio del arquitecto Alberto Martín sigue su curso. Esta semana ha tenido que dejar el que había sido el hogar conyugal para que lo disfrute su ex, tal y como estipuló la última sentencia. Sin embargo, las cosas no son siempre tan fáciles y al parecer Lydia ha abandonado la casa llevándose todas sus pertenencias.

Todos los entresijos de la situación actual de la actriz -que ha vuelto al cine con el rodaje de la película La hermandad, la primera en la que participa en diez años- se podrán conocer mañana en la revista Hoy corazón. La publicación se vende conjuntamente con La Voz los sábados por solo 0,30 euros además del precio del periódico.

Además del análisis en profundidad de lo que está pasando una de las actrices más queridas de la historia de la televisión, en el próximo número de Hoy corazón se presentan dos exclusivas. Una de ellas es la confirmación de que entre la hija de Cari Lapique, Caritina, y su marido, Antonio Matos, todo marcha bien. A pesar de que la empresaria -tiene uno de los servicios de cátering más solicitados de Madrid- reconoció hace unas semanas que en la pareja ha habido una pequeña crisis, el tiempo parece haber dado la razón a su madre, que apuntó que se trataba de un berrinche «de jóvenes» sin mayor importancia. De hecho, la propia Caritina ha reconocido recientemente cuál es el alcance de la situación: «Mi marido y yo discutimos mucho. Los dos tenemos mucho carácter y no nos callamos las cosas, pero no estamos en crisis». Y así parece, a tenor de las imágenes del matrimonio con su hijo, Pedrito, y los padres de ella, Carlos Goyanes y Cari Lapique.

Otra de las exclusivas que, como cada semana, presenta Hoy corazón tiene que ver con otra de las jóvenes más carismáticas de la jet española: Alejandra de Rojas, hija de la condesa de Montarco y muy vinculada a Galicia. La revista repasa una jornada muy intensa de la hija pequeña de Eduardo de Rojas y Charo Palacios, en la que no falta trabajo pero tampoco ocio. Este lo disfruta junto al joven con el que hace algún tiempo se le relaciona, el británico George Scott. No hay que olvidar que Alejandra de Rojas es una gran conocedora de la cultura inglesa, donde terminó sus estudios de márketing y adonde regresa con cierta frecuencia.

Además, la revista sigue con la serie de reportajes históricos en profundidad, una manera inmejorable de conocer los entresijos de los famosos europeos con la visión completa del paso del tiempo.