Para Juan Naveiro, experto en comercio antiguo, un estudio en profundidad de estas instalaciones podría arrojar nueva luz sobre la caída de las importaciones de vino en el noroeste peninsular entre los siglos II y IV de nuestra era. En esa secuencia histórica, apunta, «las vasijas para transportar el vino dan paso a una cerámica de consumo, por lo que cabe suponer que se está cultivando viñedo a nivel local».
El arqueólogo Antonio Sá Coixão, uno de los principales investigadores de los lagares rupestres del norte de Portugal, la vía de entrada de las legiones romanas a Galicia, data entre los siglos III y IV d.?C. instalaciones de este tipo excavadas en la subregión del Douro.