29 oct 2011 . Actualizado a las 06:00 h.
Un centenar de chicos de todo el mundo han llegado hasta Madrid para posar, con el torso al descubierto, alrededor de un edificio del siglo XIX, el palacio de Aguas de Sevilla, en el barrio de Salamanca. Jóvenes y sonrientes, son empleados de Abercrombie & Fitch, la marca de ropa estadounidense cuyos dependientes son modelos; para ello, no basta con ser guapo, sino que «hay que ser simpático y divertido», dijo uno de ellos. Para la inauguración de la tienda, llegaron modelos de Estados Unidos, Japón, Italia, Inglaterra, Francia, Alemania y Dinamarca.