«Paris gritaba y el médico recogía restos de fármacos», relata un testigo
30 sep 2011 . Actualizado a las 06:00 h.El director de logística de Michael Jackson, Alberto Álvarez, describió la dramática escena que vivió en la habitación del cantante en sus últimos momentos, cuando la hija del músico, Paris, gritaba llorosa y el médico recogía restos de fármacos.
Álvarez, el primer testigo en declarar en la tercera jornada del juicio por la muerte del rey del pop, fue una de las primeras personas que llegó al dormitorio cuando el doctor Conrad Murray, acusado de homicidio involuntario, alertó de que Michael había tenido una «mala reacción».
Explicó que vio a Jackson tumbado sobre la cama, boca arriba, con la cabeza mirando hacia la puerta y la boca y los ojos abiertos. Álvarez aseguró que Murray comenzó a hacer compresiones con la mano izquierda sobre el pecho de Jackson, instante en el que le apremió para que buscara ayuda.
«Alberto, deprisa, tenemos que conseguir una ambulancia y llevarlo a un hospital», dijo Álvarez, repitiendo las palabras de Murray en aquellos momentos.
Paris, la hija de Jackson, de 13 años, entró entonces en el cuarto con su hermano Prince, de 14, y gritó «¡papi!» entre lágrimas. «No les dejes ver a su padre así», pidió Murray a Álvarez en ese instante. «No os preocupéis, todo va a salir bien, nos ocuparemos de esto», dijo el doctor a los niños mientras los sacaba de la habitación Álvarez, que llamó también a los servicios de emergencia.
Según el relato del testigo, el médico agarró un puñado de frascos que estaban en una mesilla de noche, junto a la cama. «Pon esto en una bolsa», ordenó Murray. Álvarez recordó que el médico metió los recipientes en la bolsa y a continuación le indicó que retirase otra que colgaba de un gotero.
El empleado de Jackson observó que dentro de ella había un frasco que fue identificado en el juicio como Propofol, anestésico que la autopsia determinó como causa de la muerte del rey del pop.
Álvarez relató que el líquido de la bolsa era blanco, lo que encaja con la sustancia que solía usar el artista para dormir y que llamaba su «leche».