Dolor, sentimiento y lágrimas. Eso es lo que se vivió ayer en la primera jornada de Madrid Fasion Week en el momento más emotivo del día: el desfile de la colección póstuma del genial Jesús del Pozo, fallecido el pasado mes de agosto a los 64 años de edad.
El segundo desfile despertó gran expectación, pues significaba apreciar las últimas obras del modista madrileño. Incluso la ministra de Cultura, Ángeles González Sinde, hizo un hueco en su agenda para estar presente en este homenaje vestida con un diseño de Del Pozo. Y para no olvidar su recuerdo, lo primero en aparecer en la pasarela fue una modelo vestida enteramente de negro, con un pañuelo en la cabeza a modo de viuda, para homenajear al que durante tantos años fue un maestro del diseño.
Luego los aplausos no pararon de sonar en casi todas las salidas. Aunque el momento más emotivo fue al final, con todos los asistentes en pie aplaudiendo, mientras una foto proyectada en la pared del apreciado modista hacía saltar las lágrimas a numerosas personas, incluidas algunas modelos que habían vestido sus últimas creaciones.
También algunos de sus compañeros de oficio, como Modesto Lomba, Duyos o Ruiz de la Prada, quisieron darle un último adiós con su presencia en el desfile. Incluso la exministra de Cultura Carmen Alborch hizo acto de presencia en este cálido homenaje.