Si de algo tenemos ganas en Galicia es de jarana. Se nos acumulan las fiestas y no damos abasto. Este finde, preludio del grande de agosto, se presenta bien cargado: fiestas de Ferrol, Ribeira y A Coruña; el festival Son de Vigo y el Son Rías Baixas en Bueu; la Festa do Albariño y el desembarco vikingo en Catoira.
05 ago 2011 . Actualizado a las 20:15 h.Si acabas de empezar las vacaciones o si llevas de veraneo aquí ya varias semanas, si por fin has llegado al final de la semana o, incluso, si eres de esos a los que les toca hincar los codos este fin de semana -siempre hay horas libres que se pueden rescatar-, qué haces que no estás de fiesta. Los festivales calientan motores y las ciudades se ponen sus mejores galas bajo el manto blanco de un cielo enredado de nubes que no quiere abandonarnos este año. Pero eso es lo de menos, qué más da que llueva o que haga sol si hay tanto que bailar, tanto que comer y beber, tanto por ver y tanta gente que conocer. A estas alturas del verano, con un escaparate festivo como el que viene por delante, quien no se lo pasa bien, es porque no quiere.
Una de festivales
Los festivaleros este año ya pueden estar contentos. No paran. Y este fin de semana van a tener que lanzar una moneda al aire para escoger. El festival Son Rías Baixas arranca tímidamente el jueves en Bueu cogiendo fuerza para los días grandes, el viernes y el sábado. Gastronomía local, playa, zona de acampada y doce bandas que aseguran tres días inmejorables de buena música con el tirón de Sidonie, Albert Pla, Arizona Baby y Los Coronas. Para los que, en lugar de Bueu, elijan la ciudad olívica, el festival Son de Vigo, que celebra su primera edición este año, desplegará hasta el sábado, presumiendo de la fama de cantera musical de la ciudad, un contundente repertorio de solistas y bandas locales como Eladio y los Seres Queridos, Amaro Ferreiro, Ragdog, Miguel Costas e Iván Ferreiro. Los conciertos gratuitos serán en la plaza de la Constitución y por tres euros la entrada, en el auditorio del Parque de Castrelos.
De estreno también están en Xinzo, donde este fin de semana se inaugura el Patakazo Rock, un festival de música enfocado a grupos gallegos. Con el objetivo de consolidarse como una cita indispensable en el agosto de la localidad ourensana, debutará en el Campo da Feira, con zona de acampada incluida, con los grupos Bocanegra, Lysegic Proyect, Silvia Superstar, Monjackets, Socios a la Fuerza, Frikipaldis, Miguel Costas y Recambios Tucho.
Pero festivales hay para todos los gustos. Los amantes de la música folk no se pueden perder este sábado una de las citas más esperadas durante todo el año: la Festa da Carballeira en Zas. A lo largo de todo el día y hasta bien entrada la madrugada, esta localidad de la Costa da Morte se zambullirá en una fiesta absoluta de gaitas y folk con una variada selección de grupos gallegos, de Euskadi y de Irlanda. A partir de las cinco de la tarde comenzarán las actuaciones de la A. C. Castro Meda, la banda de gaitas Inllar, Muxarega, Coanhadeira, Korrontzi y Four Man and Dog, entre otros.
Ciudades en fiestas
A las fiestas de María Pita de A Coruña, que arrancaron el pasado lunes y este fin de semana continúan con la feria de artesanía, la del del libro, la taurina, las casetas regionales, y el concierto de Mercedes Peón, se les unen ahora las de Ferrol, que el viernes inaugurará su programa festivo con el pregón, a cargo del actor ferrolano Pepo Suevos, y el musical The Queen, a las 22.00 horas en la Plaza de Armas. El grupo Dios Salve a la Reina resucitará el espíritu de Fredy Mercury recordando alguno de sus temas más conocidos. El sábado, las fans de Carlos Baute tendrán que tararear sus grandes temas en el recinto ferial de FIMO, a las 22.30 horas, en lugar de hacerlo bajo las estrellas en el Reina Sofía debido a las previsiones de lluvia. De cualquier forma, las canciones, el ritmo y los movimientos de cadera del venezolano serán uno de los platos fuertes de los festejos ferrolanos preparados para este año. Para los diurnos, las calles de Ferrol Vello rescatarán del pasado el ambiente medieval con el tradicional mercadillo, artesanía, dulces y salados para seducir los paladares, torneos, espectáculos circenses y actuaciones musicales y teatrales. Muy cerca, en el muelle de Curuxeiras, los aficionados de la náutica deportiva podrán disfrutar de la séptima edición de Spinaker, una semana náutica repleta de actividades: regatas, bautismos de mar, asalto en kayak al castillo de San Felipe, talleres artísticos y pasarelas de moda.
En Ribeira también se respiran aires de fiesta estos días y, si de algo puede presumir el municipio barbancés, es de su completo y cuidado programa de conciertos que, año tras año, sigue sin defraudar. Desde el jueves hasta el domingo, a partir de la medianoche, grupos de la talla de Siniestro Total (domingo), Luar na Lubre (jueves) o Susana Seivane (viernes) se darán cita en la Plaza de España.
Mientras tanto, Pontevedra se frota las manos. Llegan los días grandes y, preparando el terreno para las fiestas de la Peregrina, los jóvenes pontevedreses recuperan del fondo de sus armarios las ropas más viejas para reunirse cada uno con sus respectivas peñas y rociar las calles, y a sí mismos, de ríos de vino. La zona vieja de la ciudad abre el fuego a Peñas, esa fiesta popular con tanto tirón y tanto tinto que se estira, con la excusa de los toros, durante los dos primeros fines de semana de agosto.
El Albariño se derrama en Cambados
Y de vino a vino, de Pontevedra a Cambados. La fiesta del Albariño, tan esperada, con tanto gancho y tanta solera, ya se encuentra en pleno apogeo desde el miércoles. Hasta el próximo domingo, cuarenta bodegas repartidas a un lado y otro del Paseo de la Calzada ofrecerán sus sus cosechas más mimadas, con copas desde un euro y medio, a los miles de visitantes de esta 59 edición de la celebración, exaltación del gran embajador del municipio pontevedrés. Cinco días donde el vino será uno de los grandes protagonistas, aunque no el único. David de María, Muchachito Bombo Infierno, Dover y Danza Invisible también tendrán sus minutos de gloria sobre el escenario y los productos del campo y de la ría de Arousa tampoco faltarán en la popular carpa gastronómica. Para llenar bien el estómago y tener donde mojar tanto Albariño.
Vikingos a la vista
En Catoira tienen todo preparado, todo a punto. Cuentan los días para celebrar su fiesta más esperada, el desembarco vikingo. A medida que se acerca primer domingo de agosto de cada año los alrededores de As Torres del Oeste comienzan a llenarse de todo tipo de gentes dispuestas a meterse en batalla y revivir la invasión vikinga en la costa aurosana. Imprescindible, una buena vestimenta nórdica, armas que den el pego, mucha pintura en la cara y riadas de vino para recuperar el espíritu nórdico. La romería, convertida ya en todo un fenómeno de masas, rememora el papel jugado por Catoira en la defensa de Galicia frente a los ataques de piratas normandos y sarracenos en busca del tesoro de Compostela.
Para saciar el apetito
Y después de todo este ajetreo, y tanta parranda, y tanta música, batalla, feria y festival, es normal que los estómagos se resientan. Por eso, nada mejor que enganchar con alguna de las muchas fiestas gastronómicas repartidas por todo el mapa gallego: en Muros, la Festa da Navalla; en Cedeira, la fiesta del percebe; en Barral, la Festa da Anguía; en la Illa de Arousa, la Festa do Mexillón; en Burela , la Feira do Bonito y en Padrón, la Festa do Pemento. Seguro que alguna te pilla de camino.