La detención de Ai Weiwei inunda la red de «amor por el futuro»

EFE

SOCIEDAD

La coincidencia de su apellido con la palabra amor ha servido a los internautas para apoyar al controvertido disidente.

08 abr 2011 . Actualizado a las 19:53 h.

Los internautas chinos protestan contra la detención del creador y disidente político Ai Weiwei y al mismo tiempo se zafan de la censura del régimen con un juego de palabras que se asemeja en chino al nombre del artista: «¡Ama el futuro!».

Mientras los censores se afanaban por eliminar a toda velocidad los «posts» sobre la detención del artista en la red de microblog más popular del país asiático, Sina Weibo, los ingeniosos internautas empezaron a buscar alternativas hasta dar con la más similar al nombre del creador, «Ai Wei Lai», o «ama el futuro», cuyos ideogramas son casi idénticos a los de Ai Weiwei.

La idea ha funcionado y la frase se ha multiplicado de forma exponencial en la red china, la mayor del mundo con más de 420 millones de usuarios, hasta que el aparato de censura más sofisticado del planeta detectó la jugada y empezó a eliminar a contrarreloj también estos mensajes.

«Nosotros amamos el futuro, no solo por una persona, sino porque esperamos que el futuro sea mejor», señala uno de estos mensajes. Otros dan más pistas sobre la situación de Ai: «Nosotros amamos el futuro, pero el futuro ha desaparecido, el futuro está en la cárcel, el futuro se ha ido». El caso es que la detención de Ai ha llenado la red de «amor», gracias al apellido del famoso diseñador del estadio olímpico de Pekín 2008.

Espíritu rebelde

La red se ha contagiado con el espíritu rebelde del que está considerado el patriarca del arte contemporáneo chino, una actitud que le viene de familia, ya que su padre, el respetado poeta Ai Qing, fue perseguido por la Guardia Roja de Mao Zedong, después de luchar con él en la revolución de los años 40.

«Estamos viviendo una situación muy parecida a la que sufrió mi marido durante la Revolución Cultural (1966-76)», explicó a Efe Gao Ying, viuda del poeta y madre de Ai Weiwei, del que asegura que, al igual que su progenitor, «hace todo lo que hace por los demás».

La detención de Ai sólo puede haberse producido con el beneplácito de la cúpula del Partido Comunista, agregó la escritora.

Ai no solo es una de las figuras más radicales y cotizadas del arte conceptual chino, como la reciente instalación de pipas de porcelana de la galería Tate de Londres, sino también un irreverente opositor al régimen chino y un líder de opinión en internet para aquellos que disponen de «proxies» para evitar la censura.

Su detención es la de mayor calado en la campaña que las autoridades llevan a cabo contra la fragmentada disidencia china desde que el Instituto Nobel Noruego anunció la concesión del premio Nobel de la Paz 2010 al intelectual chino encarcelado Liu Xiaobo, hace justo seis meses, el 8 de octubre.