Fue cogida a lazo, marcada, y le pondrán nidos artificiales en eucaliptos
21 feb 2011 . Actualizado a las 06:00 h.La captura y posterior liberación el pasado día 8 del águila pescadora que desde finales del 2010 frecuentaba la ría de Ribadeo levanta protestas entre los especialistas en aves. Las críticas son a la oenegé Fapas (Fondo para la Protección de los Animales Salvajes) y su complejo operativo para localizar y capturar al animal con el fin de colocarle un emisor que llevará durante meses. ¿Por qué el revuelo? Por las molestias a la rapaz y por las dudas sobre el interés científico de la iniciativa. «Es sabido que estas aves crían en Escocia y el norte de Europa, y aquí vuelan a invernar. Las posibilidades de que se reproduzcan son escasas y poco aportará el anillamiento en Andalucía, donde ya van ciento y pico pescadoras. No merece la pena para el animal y la ornitología. Lo veo como acción propagandística», asegura Gilberto Sánchez desde El Franco, habitual observador de aves en la ría.
Como otros ornitólogos que han expresado sus quejas en distintos foros, recuerda que el águila pescadora lleva años en expansión en Europa y de hacerlo en el Cantábrico será de modo natural. Solo justifican el método si es estrictamente necesario y con especies en peligro a las que hay que ayudar. En este caso podría ahorrarse el sufrimiento de la captura a lazo en una estaca del estuario, que tiene administración compartida con la Xunta. La Consellería do Medio Rural desconocía ayer si la captura fue en la orilla gallega o si hay denuncia alguna, recordando que los trámites suelen pasar antes por sus servicios provinciales.
Sánchez duda de la utilidad del radiotransmisor colocado en las plumas para seguirla en la ría, un marcaje distinto al que usan los especialistas desde Escocia y que ha permitido seguir por satélite la reproducción de las rapaces y sus viajes de ida y vuelta desde el norte de Europa hasta Senegal o Guinea-Bissau.
En cambio, desde Fapas defendían que la presencia de esta especie en la ría de Ribadeo no se registraba desde 1988, y que no se reproduce en el Cantábrico posiblemente desde los años sesenta del pasado siglo. Ahora detectarán los movimientos de esta águila hembra de un año de edad, marcada con dos anillas, dentro del Programa de Recuperación del Águila Pescadora en Asturias, que incluye otro ejemplar en la ría del Nalón y la que también anilló en la ría de Villaviciosa en colaboración con expertos de la Junta de Andalucía. Fapas decía que «ocupa los grandes eucaliptos del entorno del Eo, por lo que en colaboración con Ence y propietarios de eucaliptales de la vertiente gallega de Ribadeo, se tiene previsto instalar de manera inmediata nidos artificiales para favorecer su querencia por el territorio y la cría».