Por su parte, las enfermedades cardiovasculares y, en particular las que afectan a las arterias coronarias, son la primera causa de muerte en los países occidentales.
18 ene 2011 . Actualizado a las 21:09 h.Las personas con alguna enfermedad en las encías (periodontitis) tienen más riesgo de sufrir una lesión cardiovascular, como el infarto o la angina de pecho, según expertos de la Sociedad Española de Cardiología y de la Sociedad Española de Periodoncia.
Las conclusiones de una treintena de expertos en cardiología y estomatología sobre la relación que existe entre ambas patologías se han plasmado en el libro «Patología Periodontal y Cardiovascular: su interrelación e implicaciones para la salud», que han patrocinado ambas sociedades médicas y que se ha presentado hoy en la Casa del Corazón en Madrid.
Los expertos mantienen en esta obra que las personas con periodontitis, sobre todo los varones entre 40 y 50 años, tienen entre un 25% y un 50% más posibilidades de sufrir una cardiopatía isquémica, como la angina de pecho o el infarto de miocardio.
Los cardiólogos y odontólogos que han intervenido en este proyecto divulgativo han atribuido la relación entre periodontitis e infarto a la gran cantidad de bacterias situadas bajo la encía, que pueden pasar a la sangre y afectar a otros lugares del organismo, lo que aumenta el riesgo de desarrollar una enfermedad cardiovascular.
El odontólogo y coordinador del libro Blas Noguerol ha resaltado en rueda de prensa que «un cambio de hábitos de vida permitiría ayudar a prevenir ambas enfermedades de forma conjunta».
Ocho de cada diez españoles mayores de 35 años sufren algún problema en sus encías, mientras que un tercio de ellos padece periodontitis, una enfermedad irreversible, causada por bacterias, que afecta a las zonas profundas de la encía produciendo la pérdida de piezas dentales.
Por su parte, las enfermedades cardiovasculares y, en particular las que afectan a las arterias coronarias, son la primera causa de muerte en los países occidentales.
A la vista de esos datos, Blas Noguerol ha asegurado que el análisis de los estudios clínicos disponibles hasta ahora permite llegar a la conclusión de que los pacientes con enfermedad periodontal tienen más riesgo de presentar un episodio coronario.
Sin embargo, Noguerol ha advertido de que «no disponemos de una evidencia concluyente de que dicha relación sea causal ni tampoco de su magnitud», porque todavía no se han llevado a cabo ensayos clínicos.
Pese a dicha carencia los cardiólogos y los estomatólogos han subrayado la importancia de profundizar en la investigación sobre la relación entre las dos dolencias.
A la hora de diagnosticar una periodontitis, existen varias señales de alerta, como el sangrado de las encías, el mal aliento o la hipersensibilidad al frío, y para evitarla, los expertos aconsejan mantener una correcta higiene bucal y prevenir los factores que la agravan, como la diabetes, el tabaquismo y el estrés.
Por otra parte, y según los expertos citados en la obra, algunos tratamientos prescritos con frecuencia en cardiología, como los fármacos anticoagulantes, pueden dificultar el trabajo de los estomatólogos.
El libro está dirigido a profesionales de ambas disciplinas y a médicos de Atención Primaria.