Obama espanta su «aura» de musulmán cantando villancicos

La Voz WASHINGTON/EFE.

SOCIEDAD

El presidente de EE. UU. lanzó un mensaje de fe cristiana durante un acto navideño en Washington junto a su familia

14 dic 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El presidente de EE.?UU., Barack Obama, no suele hacer alarde de su cristianismo, pero ayer, acompañado de su familia, asistió a un acto navideño en Washington el que se sumó a un coro e hizo un llamamiento de amor al prójimo. La familia presidencial, incluida la suegra del mandatario, participó en el evento Navidad en Washington, realizado en el National Building Museum y que será retransmitido por la cadena por cable TNT el próximo día 17.

En la velada, el mandatario, que algunos conservadores continúan afirmando que es musulmán, deseó a todos en el adornado salón una feliz Navidad y, tras recordar la historia del nacimiento de Jesús según el Nuevo Testamento, alentó a la audiencia a pensar en los demás durante las fiestas. «Somos llamados a amar a otros como a nosotros mismos. Somos el cuidador de nuestro hermano y nuestra hermana. Es un mensaje que guía mi fe cristiana», afirmó Obama, al hacer referencia al Libro del Génesis .

Tras su breve discurso navideño, la familia presidencial se sumó a los artistas y al coro en un canto navideño para clausurar el evento, en el que participaron hijos y nietos de prominentes figuras de la clase política, asesores legislativos y miembros de la prensa.

El acto, pensado para recaudar fondos para un centro médico infantil en Washington, fue conducido por la comediante Ellen Degeneres e incluyó presentaciones musicales de Miranda Cosgrove, Annie Lennox, Matthew Morrison, Andrea Bocelli y una visiblemente embarazada Mariah Carey, entre otros. La pareja de Degeneres, la actriz Portia de Rossi, también acudió al evento y tomó asiento al lado de la familia presidencial.

Tras una hora de escuchar cánticos navideños y presentaciones musicales, Obama, su esposa, Michelle, y sus hijas, Sasha y Malia, pasaron al escenario y recibieron una ovación de la audiencia. Antes del acto, los invitados se hicieron fotos con la familia presidencial frente a un enorme árbol de Navidad repleto de regalos.