China lanza su segunda sonda lunar

Boris Cambreleng AFP

SOCIEDAD

Esta es una de las etapas del ambicioso programa chino para enviar hombres a la luna hacia el 2020 y tornarse una potencia espacial.

01 oct 2010 . Actualizado a las 22:12 h.

China lanzó este viernes, día de su fiesta nacional, su segunda sonda lunar, Chang'e-2, una de las etapas de su ambicioso programa para enviar hombres a la Luna hacia 2020 y consolidarse como potencia espacial. La sonda, lanzada por un cohete Larga Marcha 3C, despegó como estaba previsto tres segundos antes de las 19.00 horas (11.00 GMT) de la base de Xichang (sudoeste).

La televisión mostró el cohete en su rampa de lanzamiento poco antes de la salida, pero no el momento del despegue. Después difundió durante algunos segundos imágenes del cohete elevándose hacia el cielo alrededor de la base espacial.

Simbólicamente, el disparo se hizo coincidir con el día conmemorativo del 61º aniversario de la fundación de la República Popular de China por Mao Tse-tung (Mao Zedong) en 1949.

Para no perderse el evento, algunos espectadores pagaron 800 yuanes (88 euros o 118 dólares) por un sitio en una tribuna situada a 2,5 km de la rampa de lanzamiento, declaró a la AFP una empleada de la base espacial de Xichang. Una media hora después del lanzamiento, Chang'e 2, nombre de una diosa que voló hacia la Luna, había llegado a su órbita para posicionarse dentro de unos cinco días a un centenar de kilómetros del satélite natural de la Tierra. Luego se reducirá la órbita de Chang'e 2 a 15 km, lo que permitirá recabar datos más precisos que los de su predecesora Chang'e 1 sobre la zona destinada a la misión siguiente, la Chang'e 3.

Próxima misión

Prevista en el 2012 ó el 2013, la misión Chang'e 3 incluirá el aterrizaje en la Luna de un robot encargado de analizar muestras lunares. En la fase siguiente, en torno al 2017, los chinos intentarán traer a la Tierra muestras de rocas lunares como paso previo para enviar a hombres a la Luna hacia el 2020.

China lanzó en 1992 su programa de vuelo habitado y en el 2003 se convirtió en el tercer país, después de Estados Unidos y Rusia, en enviar un hombre al espacio. En septiembre del 2008, Pekín se afianzó aún más cuando tres «taikonautas», nombre chino de los astronautas, realizaron una salida al espacio durante la misión Shenzhou VII.

Y además, desde que Estados Unidos anunció al comienzo de este año que abandonaba su programa Constelación, en el que se incluía el regreso a la Luna, China es el candidato más probable al próximo vuelo habitado hacia ese satélite.

China aplazó este año -por motivos técnicos- hasta el 2011 otra etapa de su programa espacial: la puesta en órbita del módulo Tiangong-1 de su futura estación espacial.

China también está interesada en la conquista de Marte, por lo que este año envió un voluntario a Moscú para un simulacro de misión de 520 días que estudia los efectos psicológicos y físicos de semejante periplo a decenas de millones de kilómetros de la Tierra, contra sólo 380.000 para la Luna.