La guía se dirige a los centros educativos, profesores, alumnos, familias y el entorno escolar.
26 ago 2010 . Actualizado a las 19:56 h.Una guía elaborada por los Ministerios de Educación y Sanidad y Política Social «junto» a las CC.AA., cita entre los objetivos de la formación afectivo-sexual la prevención, el conocimiento de prácticas sexuales seguras y el uso correcto del preservativo en edades de riesgo, teniendo en cuenta en el contexto de pareja.
«Ganar en salud en la escuela» ha sido presentada hoy por los ministros de Educación, Ángel Gabilondo, y de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, que ha anunciado la aprobación en el próximo Consejo Interterritorial de Salud de la estrategia en salud sexual y reproductiva para avanzar en evitar los embarazos no deseados.
En general, la guía se dirige a los centros educativos, profesores, alumnos, familias y el entorno escolar, para promover y mejorar la salud, y que los estudiantes adquieran hábitos que los conviertan en adultos sanos.
Se trata de una educación transversal, según Jiménez, ya prevista en la Ley Orgánica de Educación, de participación intersectorial y de las administraciones y que exige la «complicidad» de la sociedad y, más concretamente, de las organizaciones de padres de alumnos para conseguir su eficacia, si bien el desarrollo completo corresponde a los centros según su autonomía.
Por sus 180 páginas se repasan capítulos como la actividad física, la alimentación saludable, salud mental y bienestar personal, educación afectivo-sexual, seguridad y prevención de riesgos y lesiones accidentales, educación sobre drogas, alcohol y tabaco.
Los ministros han explicado que esta guía se distribuye a las comunidades autónomas que son las que se encargan de desarrollarla según sus competencias, por ejemplo con folletos informativos y talleres formativos.
A preguntas de los periodistas, la ministra ha recordado que la formación afectivo-sexual existe desde «hace muchos años» en la escuela, ha destacado la educación en materia sexual y reproductiva como parte de la ley de interrupción del embarazo y que se ha hecho un trabajo «muy intenso» para sacar adelante la estrategia citada. La ministra ha insistido en que es «obligación» de las administraciones y su «responsabilidad» advertir de los riesgos para la salud, por ejemplo prevenir enfermedades de transmisión sexual o embarazos no deseados.
La educación afectivo-sexual también recoge la perspectiva de género y aspectos como la identificación y rechazo del abuso sexual y el respeto de las distintas orientaciones sexuales.
Sobrepeso
La ministra de Sanidad ha apuntado como problemas el mayor sedentarismo y sobrepeso en el alumnado español, el aumento de los embarazos no deseados entre las adolescentes y una reducción del consumo de drogas aún no suficiente, además de algún episodio de violencia en los centros.
Por ejemplo, la guía apunta a la actividad física cotidiana y el consumo de al menos cinco raciones de fruta o verdura diaria.
Sobre las recomendaciones de los expertos de limitar la venta de alimentos con exceso de sal, azúcares o grasas, ha señalado que básicamente la mayoría de las escuelas ya lo hacen, por ejemplo con la retirada de máquinas expendedoras. Gabilondo ha añadido que su departamento se reunirá el 1 de septiembre con las CC.AA. para estudiar cómo aplicar estas recomendaciones.